Piden la "entrada masiva y distribución de la ayuda de alimentos y medicinas" Los obispos venezolanos exigen la salida de Maduro y nuevas elecciones

Cúpula de la Conferencia Episcopal venezolana
Cúpula de la Conferencia Episcopal venezolana

“Venezuela clama a gritos un cambio de rumbo (...). Ese cambio exige la salida de quien ejerce el poder de forma ilegítima y la elección”, dice la Iglesia

La Iglesia Católica venezolana exigió ayer  la salida del presidente Nicolás Maduro del poder y la convocatoria de nuevas elecciones como solución a la grave crisis política y económica.

“Venezuela clama a gritos un cambio de rumbo (...). Ese cambio exige la salida de quien ejerce el poder de forma ilegítima y la elección en el menor tiempo posible de un nuevo presidente”, señaló la Conferencia Episcopal en una declaración leída al inicio de una asamblea ordinaria.

Maduro “debe retirarse” de la presidencia “para que se den realmente unas elecciones (...) libres”, añadió el arzobispo Jesús González en rueda de presa.

El lunes pasado, delegados de Maduro y del líder opositor Juan Guaidó reanudaron en Barbados en Centroamérica, diálogos iniciados en mayo en Oslo para buscar salidas a la crisis, con la mediación de Noruega.

Pero el número dos del chavismo, Diosdado Cabello, negó la noche del miércoles que las partes estén discutiendo una convocatoria a nuevos comicios presidenciales. “Dicen: el Gobierno va a Barbados porque va a haber elecciones presidenciales en no sé cuánto tiempo y los candidatos son X o Y (...). Aquí no hay elecciones presidenciales, aquí el presidente se llama Nicolás Maduro”, dijo Cabello, jefe de la oficialista Asamblea Constituyente que rige en el país petrolero, en su programa en la televisora estatal VTV.

El número dos del gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) tildó de “rumores” las versiones sobre negociaciones en torno a esos comicios. 

Mientras, Guaidó, reconocido como presidente encargado de Venezuela por medio centenar de países, ha reiterado que mantiene su estrategia de expulsar a Maduro para conformar un “gobierno de transición” que llame a “elecciones libres”

Maduro, bajo cuyo gobierno el país petrolero cayó en la peor crisis económica de su historia moderna, fue reelegido en mayo de 2018 en un proceso electoral boicoteado por la oposición, que lo consideró fraudulento.

El mandatario socialista acusa a la cúpula eclesiástica de actuar como un partido político, pero marca una diferencia con el papa Francisco, que en el pasado apoyó diálogos entre el Gobierno y la oposición.

Tras la conclusión del encuentro en Barbados con la oposición, el principal negociador de Maduro, el ministro de Comunicación Jorge Rodríguez, dio por cerrada el miércoles la “jornada de la mesa permanente de diálogo por la paz”, calificándola como un “exitoso intercambio”.

“Agradecemos a la primera ministra de Barbados, Mía Mottley, por su hospitalidad”, agregó.

Guaidó, presidente del Parlamento reconocido como mandatario encargado de Venezuela por medio centenar de países, pidió confianza el lunes ante las “dudas” de un sector de la oposición, que considera que el Gobierno socialista intenta tomar “oxígeno” con las conversaciones en Barbados.

“Todos los espacios”, aseveró Guaidó en un video que difundió en redes sociales, responden a “una sola estrategia”: “cese de usurpación, gobierno de transición y elecciones libres”.

El enviado especial de la Unión Europea, Enrique Iglesias, estuvo reunido con Maduro y con la oposición esta semana en busca de salidas a la crisis.

Oposición y Gobierno acuerdan mesa de trabajo permanente

El Gobierno y la oposición de Venezuela acordaron establecer una mesa de trabajo permanente para intentar resolver la crisis política, tras concluir una ronda de diálogo en Barbados, informó ayer  el Gobierno de Noruega, que auspicia las conversaciones.

“Como parte de este proceso, se ha instalado una mesa que trabajará de manera continua y expedita, con el fin de llegar a una solución acordada y en el marco de las posibilidades que ofrece la Constitución”, señaló el Ministerio noruego de Asuntos Exteriores en un comunicado.

“Está previsto que las partes realicen consultas para poder avanzar en la negociación”, añadió el texto, sin detallar fechas de nuevos encuentros. 

El Gobierno europeo instó a las partes a tomar la “máxima precaución en sus comentarios y declaraciones respecto al proceso”. “Reitero mi reconocimiento a las partes por sus esfuerzos y su espíritu de cooperación, y agradezco al Gobierno de Barbados por su hospitalidad”, expresó la ministra de Asuntos Exteriores, Ine Eriksen Søreide, citada en el texto. Los  dos bandos se reunieron para dar continuidad al diálogo iniciado en Oslo.

EEUU congela cuentas de la agencia  de inteligencia

Estados Unidos (EEUU) sancionó  a la Dirección General de Contrainteligencia Militar (DGCIM) de Venezuela tras la muerte por presuntas torturas del militar Rafael Acosta, detenido en ese centro acusado de conspirar contra el presidente Nicolás Maduro, reportó AFP.

“El arresto por motivos políticos y la muerte trágica del capitán Rafael Acosta fue injustificado e inaceptable”, dijo el secretario del Tesoro, Steven Mnuchin, al anunciar la medida.

La sanción implica el bloqueo de todos los bienes y activos que la DGCIM tenga directa o indirectamente bajo jurisdicción de EEUU, así como la prohibición de toda transacción legal que involucre a individuos y entidades estadounidenses.

El Departamento del Tesoro está comprometido a “poner fin al trato inhumano” del gobierno de Maduro hacia sus opositores, subrayó Mnunchin, citado en un comunicado.

Acosta murió el 29 de junio bajo custodia de la DGCIM. El capitán de corbeta de la Marina venezolana había sido arrestado el 21 de junio vinculado a un supuesto plan para matar a Maduro. 

Dado por desaparecido durante una semana, fue presentado el 28 de junio ante un tribunal militar en silla de ruedas, incapaz de hablar y con señales de tortura. El juez ordenó su traslado a un hospital militar, donde horas después falleció. La muerte de Acosta “es sólo la muestra más reciente de brutalidad llevada a cabo por una agencia notoria por sus métodos violentos”, dijo el Tesoro, señalando que el uso de la tortura por parte de la DGCIM ya fue detallado por la ONU.

Comunicado completo: Dios quiere para Venezuela un futuro de esperanza

Este 11 de julio de 2019, en horas del mediodía, la Conferencia Episcopal Venezolana realizó la lectura de la Exhortación Pastoral de la CXII Asamblea Ordinaria Plenaria del Episcopado Venezolano “Dios quiere para Venezuela un futuro de esperanza”. En nombre de los Arzobispos y Obispos de Venezuela, Mons. Jesús González De Zárate, Arzobispo de Cumaná; Mons. Jorge Aníbal Quintero, Obispo de Barcelona y Mons. José Manuel Romero, Obispo de El Tigre, dieron a conocer la Exhortación Pastoral que recoge las reflexiones sobre la situación actual del país para “poner en evidencia la magnitud de problemas que nos aquejan” y “brindar orientaciones que nos ayuden a darles respuesta”.

Mons. Jesús González De Zárate fue el responsable de hacer la lectura de la Exhortación Pastoral que hace mención a la realidad venezolana desde las conclusiones reflejadas en el informe de la Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos del 4 de julio de 2019, en las que se exalta que “existen motivos razonables para creer que se han cometido graves violaciones de los derechos económicos y sociales”, que “durante más de un decenio, Venezuela ha adoptado e implementado una serie de leyes, políticas y prácticas que han restringido el espacio democrático” y que “el Estado hay denegado sistemáticamente los derechos de las víctimas de violaciones de los derechos humanos a la verdad, la justicia y la reparación, entre otras apreciaciones presentes en dicho informe.

A su vez destacó, basado en la exhortación, dos ejemplos recientes de dichas violaciones a los derechos humanos; la muerte del Capitán de Corbeta Rafael Acosta Arévalo y la pérdida de la visión del joven Rufo Chacón, a causa del uso excesivo de la fuerza por parte de organismos del Estado, los cuales fueron condenados en un reciente comunicado de la Comisión de Justicia y Paz de la CEV el pasado 04 de julio de 2019.

El episcopado venezolano hizo referencia a la diáspora venezolana indicando que más del 12% de la población ha emigrado, y afirmó que si el deterioro de la situación económica y social continúa, en los próximos meses el país perderá parte importante de su población. “La inmensa mayoría de los habitantes del país rechaza esta situación porque se encuentra en abierta contradicción con los tradicionales valores cívicos, culturales y religiosos que han caracterizado a nuestro pueblo” exponen los obispos. “Los venezolanos seguimos apostando por una convivencia ciudadana plural, pacífica, en justicia, libertad y solidaridad, como lo establece la constitución”.

La dignidad de la persona y el bien común, valores irrenunciables

Tras repasar el contexto actual que atraviesa el país, Mons. González De Zárate dio a conocer la postura de la Iglesia venezolana ante la problemática que enfrenta la ciudadanía, plasmada en la Exhortación Pastoral. “Proclamamos como hombres de fe que Dios quiere lo mejor para Venezuela (…) Tal como lo afirmamos en el Concilio Plenario de Venezuela, una de las grandes tareas de la Iglesia en nuestro país consiste en la construcción de una sociedad más justa, más digna, más humana, más cristiana y solidaria”.

Para ello, los obispos venezolanos indican que “los regímenes políticos, ideologías, organizaciones o instituciones deben estar al servicio de estos principios fundamentales. Esto exige una decidida promoción y defensa de los derechos humanos y una permanente denuncia a los abusos y violaciones de esos derechos, ya que todos los atropellos a esa dignidad son atropellos al mismo Dios (…) La renovación ética y espiritual del país es tarea de todos”.

La tarea de reconstruir Venezuela: decisiones urgentes

La Exhortación Pastoral de la CXII Asamblea Ordinaria Plenaria del Episcopado Venezolano señala las acciones pertinentes que deben tomarse para enfrentar las vicisitudes que afectan al país, pues “ante la realidad de un gobierno ilegítimo y fallido, Venezuela clama a gritos un cambio de rumbo, una vuelta a la constitución”.

“Ese cambio exige la salida de quien ejerce el poder de forma ilegítima y la elección en el menor tiempo posible de un nuevo Presidente de la República” expuso el Arzobispo de Cumaná, haciendo lectura de la exhortación. “Para que sea realmente libre y responda a la voluntad del pueblo soberano, dicha elección postula algunas condiciones indispensables, tales como: un nuevo Consejo Nacional Electoral imparcial, la actualización del registro electoral, el voto de los venezolanos en el exterior y una supervisión de organismos internacionales como la Organización de las Naciones Unidas (ONU), la Organización de Estados Americanos (OEA) y la Unión Europea, entre otras; igualmente el cese de la Asamblea Nacional Constituyente”.

La CEV también emitió su posición sobre la emergencia humanitaria, recalcando que “es urgente que se permita la entrada masiva y distribución de la ayuda de alimentos y medicinas”, para lo cual, la Iglesia Católica se compromete a prestar su ayuda para la recepción y distribución de los insumos, a través de sus instituciones particulares, tales como Cáritas. “Reiteramos nuestro compromiso como Iglesia de seguir fortaleciendo la fe en Jesucristo que sana y libera, y llevando esperanza a nuestro pueblo”.

El Arzobispo de Cumaná agradeció, en nombre de la Iglesia Venezolana, “el apoyo que nos brinda el Papa Francisco, así como la Iglesia y los gobiernos de otros países y especialmente de nuestros vecinos, para que podamos continuar llevando adelante esta obra evangelizadora, y la atención que brindan a los venezolanos que han emigrado” y culminó la lectura de la Exhortación Pastoral alentando a los fieles y laicos “a no ceder en el buen propósito de orar con humildad y trabajar con confianza por el bienestar de nuestro país”.

Prensa CEV

11 de julio de 2019

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