Tragedia en medio de la precariedad cotidiana
Recordaron los prelados que la emergencia causada por el huracán se suma a la compleja situación cotidiana de Cuba, marcada por la escasez de bienes esenciales, los cortes prolongados de energía y la proliferación de enfermedades.
Aun en la difícil situación provocada por el huracán, los obispos agradecieron a Dios que no se hayan registrado hasta el momento pérdidas humanas y la entrega generosa de quienes brindaron refugio a las personas en situación de mayor vulnerabilidad.
Llamado a la solidaridad y a la esperanza
En su comunicado, los obispos cubanos hicieron un llamado a la acción solidaria de las Iglesias y Cáritas hermanas, y de los cubanos residentes tanto en la isla como en el extranjero, para contribuir a la atención de los damnificados. El episcopado habló de la importancia de proveer alimentos, ropa, colchones, utensilios del hogar y materiales de techado, con especial prioridad para los ancianos y personas que viven solas.
Agradecieron además las expresiones del papa León XIV en su audiencia general, quien mostró cercanía con los pueblos de Jamaica y Cuba, invitando a la oración y a la acción caritativa. También valoraron la rápida respuesta y los mensajes de apoyo fraterno de los obispos de Honduras.
Por último, los prelados confiaron al cuidado de Dios y de la Virgen de la Caridad de El Cobre el sufrimiento del pueblo, seguros de que la gracia y la misericordia de Dios no los abandonará. Cáritas Cuba, por su parte, coordinará los canales oficiales para la recepción y distribución de la ayuda humanitaria.
⚠️⚠️La Iglesia Católica ofrece a las Caritas Nacional de Cuba para canalizar cualquier ayuda que ofrezcan.
— Mag Jorge Castro🇨🇺 (@MagJorgeCastro) October 30, 2025
“La situación de tragedia nacional en la que nos deja el ciclón se suma ahora a la ya difícil realidad cotidiana de nuestro pueblo” pic.twitter.com/N2GNKaaxGI
 
    
             
        