PREMIO PRINCESA DE ASTURIAS DE COMUNICACIÓN Y HUMANIDADES 2022 ADAM MICHNIK

Michnik es uno de los más conocidos y destacados defensores de los derechos humanos en Polonia y está considerado como uno de los personajes fundamentales en la recuperación de la democracia en el país, además de un extraordinario periodista.

TRAYECTORIA

Nacido en Varsovia el 17 de octubre de 1946, Adam Michnik se formó en historia en la universidad de la capital polaca, donde tuvo problemas por participar en protestas, hasta que fue expulsado en 1968. Finalmente, en 1975 se graduó a distancia en Historia por la Universidad Adam Mickiewicz de Poznań. Encarcelado en varias ocasiones desde los años sesenta, fue uno de los fundadores del movimiento KOR (el comité para la defensa de los trabajadores) y miembro del sindicato Solidaridad desde su creación en 1980. Desde 1977 fue editor en varias revistas independientes y formó parte de la dirección de Niezależna Oficyna Wydawnicza, una de las editoriales más destacadas de la oposición polaca. En el denominado «año revolucionario» de 1989 llegó a ser diputado y fundó el periódico independiente Gazeta Wyborcza, del que sigue siendo redactor jefe.

Michnik es uno de los más conocidos y destacados defensores de los derechos humanos en Polonia y está considerado como uno de los personajes fundamentales en la recuperación de la democracia en el país, además de un extraordinario periodista. Desde las páginas de Gazeta Wyborcza –en la actualidad uno de los diarios de mayor difusión de Europa central–, siempre ha defendido el diálogo por encima de toda clase de divisiones entre las más diversas culturas, razas, ideologías, sociedades y etnias. También fue un firme defensor del ingreso de su país en la Unión Europea. Michnik pasó seis años en las prisiones del régimen comunista polaco y fue uno de los impulsores de la reconciliación nacional, tomando como ejemplo el modelo español de los Pactos de la Moncloa. En 1989, tres años después de su última estancia en la cárcel, desempeñó su tarea política como miembro de la primera Cámara Baja no comunista de Polonia.

Es autor de varios libros sobre temas políticos e históricos y ensayos traducidos a varios idiomas, como Letters from Prison and Other Essays (1986), The Church and the Left (1992), Letters from FreedomPost-Cold War Realities and Perspectives (1998) y In Search of Lost Meaning: The New Eastern Europe (2011) (En busca del significado perdido. La nueva Europa del Este, 2013). También ha entrevistado a un gran número de personalidades de todo el mundo. Sus artículos han sido publicados en periódicos y revistas europeos como Der SpiegelLe MondeLiberation y El País y los estadounidenses The Washington Post y The New York Review of Books. En 2018 fue uno de los treinta intelectuales que firmaron el manifiesto Europa en llamas, sobre la amenaza de los populismos. Es miembro del consejo emérito de Reporteros sin Fronteras. Conocedor de la política rusa, ha seguido de cerca y comentado en diferentes artículos la invasión de Ucrania de este mismo año, mostrándose muy crítico con las decisiones y actos de Vladímir Putin.

Doctor honoris causa por varias universidades, es Comandante de la Orden de Bernardo O'Higgins de Chile y ha recibido la Cruz de Oficial del Mérito de la República de Hungría, la Orden del Gran Príncipe Giedymin de Lituania, la Gran Cruz del Mérito de Alemania, la Orden de Yaroslav I el Sabio de Ucrania y la Legión de Honor francesa, entre otros reconocimientos. Premiado internacionalmente en numerosas ocasiones, entre los galardones obtenidos se encuentran el Premio de Derechos Humanos Robert F. Kennedy (1986) y el Francisco Cerecedo de Periodismo (España, 1999). En 2000 el Instituto Internacional de la Prensa (IPI) publicó su lista de los 50 héroes de la libertad de prensa, en la que incluyó a Michnik. En 2011 fue distinguido con la Medalla Goethe del instituto homónimo alemán; en 2015, con el Premio Libertad del Parlamento Lituano; en 2016, recibió el Ortega y Gasset del diario El País; en 2018, el Internacional Primo Levi italiano, y este mismo año, el Premio Gilel Storch, otorgado por la organización sueca que promueve la cultura judía, Judisk Kultur.

ACTA DEL JURADO

Reunido en Oviedo el jurado del Premio Princesa de Asturias de Comunicación y Humanidades 2022, integrado por Luis María Anson Oliart, Gabriela Cañas Pita de la Vega, Adela Cortina Orts, Estrella de Diego Otero, Miguel Falomir Faus, Taciana Fisac Badell, Santiago González Suárez, Álex Grijelmo García, Miguel Ángel Liso Tejada, Helena López de Hierro d’Aubarède, Enrique Pascual Pons, José Manuel Pérez Tornero, Carmen Riera i Guilera, Fernando Rodríguez Lafuente y María Sefidari Huici, presidido por Víctor García de la Concha, y actuando como secretario Alberto Anaut González, acuerda conceder el Premio Princesa de Asturias de Comunicación y Humanidades 2022 a Adam Michnik, por su compromiso con el periodismo de calidad y por su influencia en la recuperación y en la defensa de la democracia en Polonia.

La lucha de Michnik en favor de los derechos humanos y del diálogo lo llevó a las cárceles del régimen comunista polaco, pero no por ello desistió de su firme oposición a la dictadura ni de buscar la reconciliación entre sus conciudadanos. Michnik, cuya concepción de Europa contribuyó a asentar en su país los valores democráticos, constituye además hoy en día un símbolo de la libertad de expresión y del humanismo, así como un ejemplo ético de resistencia frente a las amenazas autoritarias.

Oviedo, 11 de mayo de 2022

DZCLARACIONES

Declaraciones de Adam Michnik tras la concesión del Premio Princesa de Asturias de Comunicación y Humanidades 2022

"Estoy muy contento y agradecido por este premio. Veo en él un reconocimiento a la oposición democrática en Polonia, que tanto aprendió de la Transición española. Igualmente, considero que se distingue la labor de Gazeta Wyborcza, que ha aprendido mucho de la prensa independiente española. Es un gran honor para mí recibir este galardón. Gracias".

Adam Michnik
Varsovia, 11 de mayo de 2022

DISCURSO

Desde la humildad y con gran emoción, deseo expresar mi agradecimiento al jurado de este extraordinario premio.

También doy mi más sincera enhorabuena a todos los premiados.

España ha sido para mí –y para muchos otros polacos– un modelo a seguir. La experiencia española nos enseñó a enfrentarnos a la dictadura y a buscar un camino hacia la democracia a través del diálogo y el consenso. Había que conseguir que la fuerza de los argumentos reemplazara el argumento de la fuerza.

Después de todo, este magnífico Premio Princesa de Asturias no es para mí, sino para Gazeta Wyborcza, el periódico que nació al mismo tiempo que la democracia polaca, en 1989.

Desde el principio, Gazeta Wyborcza se esforzó por formar parte de esta democracia.

Personalmente, debo mucho a la experiencia y a los consejos de mis amigos de la redacción del diario El País, que tan importante papel desempeñó en la conformación de la democracia española.

Durante todos estos años hemos querido defender dos valores imprescindibles de la democracia: la libertad y la verdad.

Hoy, estos valores se ven de nuevo amenazados por la criminal agresión del régimen de Putin contra Ucrania.

La guerra del régimen de Putin contra Ucrania es en realidad una guerra contra todo el mundo democrático.

Cada día nos encontramos con espantosas imágenes de saqueos, violaciones, torturas y asesinatos, perpetrados por el ejército de Putin en Ucrania.

Pero Putin no es Rusia. Por eso queremos recordar a aquellos rusos que se oponen a esta barbarie bélica y manifiestan abiertamente su oposición. Son ellos los que defienden el honor de Rusia, como lo hicieron en su día Sájarov y Solzhenitsyn; como Thomas Mann defendió el honor de Alemania durante los años del apocalipsis nazi.

Debemos respetarlos por ello.

Esta es una guerra malvada desencadenada por hombres malvados que, poseídos por la locura del imperialismo de la Gran Rusia, nos recuerdan hoy de lo que son capaces los hombres envenenados por la mezcla de nazismo y bolchevismo, y por su crueldad y anarquía.

Putin no puede ganar esta guerra. Ayudar a Ucrania en su lucha es el deber de todos los demócratas del mundo y la solidaridad con Ucrania de los demócratas de tantos países inspira admiración y esperanza.

No obstante, también podemos observar señales preocupantes en Europa y en Estados Unidos.

En la vida pública está ganando terreno una tendencia que recurre al lenguaje y a la práctica del populismo agresivo, del nacionalismo y del autoritarismo.

Es la práctica del desprecio expresado en el lenguaje de la izquierda y de la derecha totalitarias. Una agita banderas negras y la otra, rojas.

De todos modos, como escribió un poeta polaco, «los fascistas a menudo cambian de camisa».

Lo que unos y otros tienen en común es el desprecio hacia lo más valioso de la tradición europea: la misericordia, la infancia, la tradición cristiana y la razón de los descendientes del Siglo de las Luces.

Estos herederos de las tradiciones totalitarias prometen, en lugar de la democracia, una visión absurda de un mundo étnicamente puro o perfectamente igualitario.

Pero nosotros recordamos que sólo los campos de concentración fueron étnicamente puros e imbuidos de una perfecta igualdad.

En su libro dedicado a la obra maestra de Cervantes, El Quijote, el gran escritor y filósofo español Miguel de Unamuno dijo:

«Y no servía que Maese Pedro advirtiese a Don Quijote que aquellos que derribaba, destrozaba y mataba no eran verdaderos moros sino unas figurillas de pasta, pues no por eso dejaba de menudear aquél cuchilladas. Y hacía bien, muy requetebién. Arman los maeses Pedros sus retablos de farándula y pretenden que por ser las de ellos figurillas de pasta, declaradas tales, se les respete. Y lo que el Caballero andante debe derribar, descabezar y estropear es lo que a título de ficción hace más daño que el error mismo. Porque es más respetable el error creído que no la verdad en que no se cree».

El Premio Princesa de Asturias es una muestra de que merece la pena mantener la libertad, la decencia y el derecho a equivocarse cuando se busca la verdad.

Fuente: https://www.fpa.es/es/premios-princesa-de-asturias/premiados/2022-adam-michnik.html?texto=declaracion&especifica=1

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