Es un hombre libre, y muy divertido. Profundamente creyente, está convencido de que vivir en la frontera es su obligación, como cristiano y como jesuita. Acaba de publicar "Vivir en la frontera" (Nueva Utopía), y con ese motivo he tenido ocasión de entrevistarlo. En pocos días verán la entrevista íntegra en RD. Una de las preguntas que más me interesaba hacerle estaba en el miedo. ¿Siente miedo Juan Masiá? Por las consecuencias de sus actos, por la "neoinquisición" que parece hacerse más fuerte a cada rato, por la falta de libertad en nuestra Iglesia... Pero Masiá es un hombre sin miedo. Se podrá estar o no de acuerdo con él, pero nadie podrá negar que es un hombre, un jesuita libre. Un hombre al que la Verdad le ha hecho libre, al que la búsqueda del Resucitado le ha hecho seguir adelante, pese a todo... Benditas equivocaciones, si es que las tiene, contadas con esa gracia, esa amabilidad y esa sonrisa en la cara. "¿Qué le diría Jesús a Camino o a Rouco si volviera a la Tierra?", le he preguntado. Que no es esto, que no es esto... responde Masiá. Pero ojo, "tampoco les enviaría un rayo. Les defendería y defendería su libertad para decir lo que piensan y en lo que creen". Ojalá otros aprendieran a hacer lo propio. La historia -y la Iglesia es maestra también en esto- colocará a cada uno en su sitio. Y Masiá tendrá un lugar destacado.

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