Éste es el lema de un cartel que circula (bueno, está parado) por las calles del Principado de Asturias, queriendo demostrar un tipo de igualdad que se busca entre los hombres y mujeres. El cartel en cuestión se ha financiado con el apoyo de IDEPA (Instituto de Desarrollo Económico del Principado de Asturias), la Obra Social y Cultural de CajaAstur y la Consejería de Educación y Cultura del Principado de Asturias. Se dice que está detrás el Partido Socialista. Leído hasta el final dice así: Soy puta, soy negro, soy marica, soy moro, soy sudaca, soy mujer. El diferente eres tú, imbécil. Son muchos ya los que lo han criticado y condenado con duras palabras y razones. He querido entrar en el debate con unas simples razones de tipo social y cristiano.

Siete razones sobre un cartel discutido

Este comentario ha nacido el día de la Merced, con un post en el que escribí: Soy la cautiva y encarcelada, la excluida y hambrienta, la extranjera sin derechos. La Virgen de la Merced aparece en la tradición cristiana como aquella que se identifica con los cautivos, oprimidos y encarcelados…
Este comentario quiere situar el tema del cartel a la luz de Mt 25, 31-46, donde Jesús (el mesías) se presenta diciendo: soy hambriento, sediento, extranjero, encarcelado, en primero persona, como el cartel..
En ese contexto quiero decir unas palabras, forzando quizá el castellano y diciendo “soy” (como el cartel), en vez de tuve o estoy. El lector lo entenerá


1. Es un cartel provocador, no hay duda

Así lo he querido entender. No define, no prueba, sino que expone una realidad de nuestro mundo, antes uniforme… Es un bien que se hayan destacado algunos “temas” antes oculto (prostitución, homosexualidad…). Es un bien que se sepa que hay diferencias que marcan… Desde ese fondo, el cartel acusa a los que se creen “iguales”. No me parece bien que le llame imbéciles, pero es un modo de provocar. El Jesús de Mt 25, 31-46 les amenaza con el infierno.

2. Vincula seis “males”, seis diferencias que parecen importantes.

Ciertamente, son importantes… son visibles… No sé si el último (soy mujer) ha de verse en la misma línea que los cinco anteriores. De todas formas, véase que el cartel empieza con mujeres (putas) y acaba con la mujer en general:

Soy puta,
soy negro,
soy marica,
soy moro,
soy sudaca,
soy mujer

3. Pero deja otros males importantes, quizá menos rentables políticamente, como podrían ser algunos de los que citaré a continuación… No sé por qué no se añade el “soy pobre” (hambriento), pues la pobreza es quizá la razón de todos los restantes males. El sudada y el moro… aparecen como “peligro” cuando soy pobres, no cuando tienen millones. Para mí, el escándalo está en que el cartel no pone la primera y última necesidad que ha destacado Jesús de Nazaret en Mt 25

Tengo pobre
Soy encarcelado,

Eso significa que el cartel no parte del principio ni llega al final de las necesidades... No dice demasiado, sino demasiado poco. También podría haber puerto otros temas...

Soy sidoso
Soy anciano
(por favor, que cada uno añada los que vea...)

4. Jesús de Nazaret ha dicho unas palabras semejantes, identificándose con seis males básicos de su sociedad y de la nuestra:. Me hubiera gustado mucho que la Iglesia de Asturias hubiera dedicada algo de su dinero a poner, al lado de los carteles anteriores otros que dijeran:

Soy hambriento,
Soy sediento
Soy desnudo
Soy extranjero
Soy enfermo
Soy encarcelado

5. El cartel insulta a los “no distintos”… diciendo: el diferente eres tú, imbécil

Ya sé que el insulto es una forma de provocación... y un deseo de cambio. En eso dice lo mismo que Jesús... que no insulta, pero amenaza de un modo más fuerte


6. Jesús advierte a los “no distintos”, diciendo que pueden “condenarse”, es decir, perder su vida, perder su humanidad… Pero les invita a transformar la realidad:

Dar de comer
Dar de beber
Vestir al desnudo
Acoger al extranjero
Visitar al enfermo
Liberar al encarcelado

7. La conclusión queda para cada uno...