Conversación del Papa con los jesuitas del Congo y Sudán del Sur Francisco: "No se me ha pasado por la cabeza renunciar"

El Papa, con los jesuitas de Congo y Sudán
El Papa, con los jesuitas de Congo y Sudán Antonio Spadaro, sj

"Escribí mi dimisión dos meses después de las elecciones y entregué esta carta al cardenal Bertone. No sé dónde está la carta"

"Benedicto tuvo el valor de hacerlo porque no quería seguir adelante a causa de su salud. Esto no está en mi agenda por el momento. Creo que el ministerio del Papa es ad vitam. No veo ninguna razón para que no sea así", subrayó, bromeando: "Si le hiciéramos caso a los «chismes», ¡entonces deberíamos cambiar de Papa cada seis meses!"

Sobre la beatificación de Arrupe: "Hablé de ello con el Padre General", sostiene Francisco, quien apunta a que "el mayor problema tiene que ver con los escritos del padre Arrupe. Escribió mucho y es necesario leerlo todo. Y esto hace más lento el proceso"

"No, no se me ha pasado por la cabeza (renunciar). Pero escribí una carta y se la entregué al cardenal Bertone. Contiene mi dimisión en caso de que no me encuentre en el estado de salud y conciencia para poder renunciar. Pío XII también escribió una carta de renuncia, como prevención en el caso de que Hitler se lo llevara a Alemania. En ese caso dijo que capturarían a Eugenio Pacelli y no al Papa". El Papa Francisco desmintió con rotundidad que vaya a dimitir, durante sus sucesivos encuentros con los jesuitas de Congo y Sudán del Sur.

El texto íntegro de ambos diálogos, como viene siendo costumbre, ha sido publicado por Antonio Spadaro sj., en La Civilta Cattolica. La primera respuesta se produjo el 4 de febrero en Yuba, mientras que la primera tuvo lugar dos días antes en la Nunciatura de Kinshasa. Allí, Francico recordó que "escribí mi dimisión dos meses después de las elecciones y entregué esta carta al cardenal Bertone. No sé dónde está la carta".

¿Por qué lo hizo? "Lo hice por si tengo algún problema de salud que me impida ejercer mi ministerio y no soy plenamente consciente para dimitir. Sin embargo, esto no significa para nada que la renuncia de los Papas deba convertirse en algo así como una «moda», algo normal", matiza.

"Benedicto tuvo el valor de hacerlo porque no quería seguir adelante a causa de su salud. Esto no está en mi agenda por el momento. Creo que el ministerio del Papa es ad vitam. No veo ninguna razón para que no sea así", subrayó, bromeando: "Si le hiciéramos caso a los «chismes», ¡entonces deberíamos cambiar de Papa cada seis meses!".

El generalato de la Compañía, de por vida

Lo que piensa para el Papado, también lo piensa para los jesuitas. "En esto soy «conservador». Debe ser para toda la vida. Pero, obviamente, surge la misma pregunta que concierne al Papa. El Padre Kolvenbach y el Padre Nicolás, los últimos dos Generales anteriores, lo dejaron por motivos de salud. Me parece importante recordar, además, que una de las razones por las que el generalato en la Compañía es de por vida es para evitar cálculos electorales, las facciones, los chismes…", contestó Bergoglio.

El Papa, con los jesuitas en Congo y Sudán del Sur

Francisco también habla sobre la causa de beatificación de Arrupe, que "sigue adelante, porque una de las etapas ya se ha completado". "Hablé de ello con el Padre General", sostiene Francisco, quien apunta a que "el mayor problema tiene que ver con los escritos del padre Arrupe. Escribió mucho y es necesario leerlo todo. Y esto hace más lento el proceso".

Respecto a los avances ecuménicos, el Papa anunció un encuentro para 2025 con el patriarca Bartolomé en Nicea, con motivo de los 800 años del Concilio. "Con el Patriarca Bartolomé queremos llegar a un acuerdo sobre la fecha de la Pascua, que justo en ese año coincide. A ver si nos ponemos de acuerdo para el futuro. Y queremos celebrar este Consejo como hermanos. Nos estamos preparando para ello. Piensen que Bartolomé fue el primer Patriarca que acudió a la inauguración del ministerio de un Papa, ¡después de tantos siglos!".

Semana RD: Diez años del pontificado
Volver arriba