"Jesús es Dios, ¿por qué se hace bautizar? Porque quiere estar en la fila con los pecadores" Francisco condena la violencia en EEUU y pide "recuperar los valores democráticos del país"

Francisco, desde la Biblioteca Apostólica
Francisco, desde la Biblioteca Apostólica

"Es así como Dios vence el mal del mundo: bajando y haciéndose cargo. Es también la forma en la que nosotros podemos levantar a los  otros: no juzgando, no insinuando qué hacer, sino haciéndonos cercanos, com-padeciendo, compartiendo  el amor de Dios"

"Dios no nos salva desde lo alto, con una decisión soberana o un acto de fuerza, sino viniendo a nuestro encuentro y tomando consigo nuestros pecados"

Francisco ya no cita a Trump como presidente de EEUU., pero sí ha querido condenar la violencia sufrida durante el asalto al Capitolio de Washington. Tras el rezo del Angelus, el Papa quiso orar "por quienes han perdido la vida, cinco", en los actos vandálicos. "La violencia es autodestructiva siempre", clamó el Pontífice, quien exhortó "a las autoridades del Estado a mantener un alto sentido de responsabilidad con el fin de calmar los ánimos, volver a la reconciliación nacional y recuperar los valores democráticos del país".

Este año no hubo bautizos en la Capilla Sixtina, siguiendo las medidas anti-covid del Vaticano. Pero sí hubo espacio para hablar de un momento vital de la vida de todo cristiano, y del propio Jesús: el momento en que Juan bautiza a Jesús. "Jesús es Dios, ¿por qué se hace bautizar?" ¿Por qué el hijo de Dios necesita ser bautizado? Esta fue una de las preguntas que se hizo el Papa Francisco durante su reflexión previa al rezo del Angelus, de nuevo desde la Biblioteca Apostólica.

"La liturgia -explicó- nos hace realizar un salto de unos treinta años", desde la visita de los Magos al Jordán. "Años de vida escondida, que Jesús pasó en familia, obedeciendo a los padres, estudiando y trabajando".

"Impresiona que el Señor haya pasado  así la mayor parte del tiempo en la Tierra, viviendo la vida de todos los días, sin aparecer", señaló Bergoglio. "Es un bonito mensaje para nosotros: nos revela la grandeza de lo cotidiano". 

Francisco, en el Angelus de hoy
Francisco, en el Angelus de hoy

Pero, ¿por qué se bautiza? "Realmente Jesús no lo necesitaba. De hecho Juan Bautista trata de oponerse, pero Jesús  insiste. ¿Por qué? Porque quiere estar con los pecadores: por eso se pone a la fila con ellos y cumple su  mismo gesto".

El "manifiesto programático" de Jesús

Y, con ello, añadió, nos ofrece "su manifiesto programático", que dice nada más y nada menos que "Dios no nos salva desde lo alto, con una decisión soberana o un acto de fuerza, sino viniendo a nuestro encuentro y tomando consigo nuestros pecados".

"Es así como Dios vence el mal  del mundo: bajando y haciéndose cargo. Es también la forma en la que nosotros podemos levantar a los  otros: no juzgando, no insinuando qué hacer, sino haciéndonos cercanos, com-padeciendo, compartiendo  el amor de Dios", recalcó.

Jesús se hace siervo de los pecadores y es proclamado Hijo; baja sobre nosotros y  el Espíritu desciende sobre Él. Amor llama amor. Vale también para nosotros

Después, los cielos se abren, y vemos la trinidad, a Dios y a su hijo con el Espíritu Santo en forma de paloma. "Jesús se hace siervo de los pecadores y es proclamado Hijo; baja sobre nosotros y  el Espíritu desciende sobre Él. Amor llama amor. Vale también para nosotros: en cada gesto de servicio,  en cada obra de misericordia que realizamos Dios se manifiesta y fija su mirada en el mundo".

El Papa, desde la Biblioteca Apostólica
El Papa, desde la Biblioteca Apostólica

Recordar nuestro Bautismo

Por eso, añadió el Papa, su insistencia de "recordar el día del Bautismo: es una fecha para marcar y celebrar cada año. Desde entonces,  para siempre, somos los hijos amados de Dios. Podemos pensar cosas equivocadas y cometer muchos  errores, pero permanecemos siempre los hijos amados de Dios. Es nuestra identidad más profunda. Es el  primer punto de la vida espiritual y se nos recuerda por el primer gesto público de Jesús. La Virgen, a la que ahora rezamos, nos ayude a custodiar nuestra identidad bautismal, que está en la base de la fe y de la  vida".

Tras el rezo del Angelus, junto a la cita a EEUU, Francisco recordó cómo "a causa de la pandemia hoy no he podido celebrar el bautismo en la Capilla Sixtina, pero quiero asegurar mi oración por lo niños inscritos, por sus padres y padrinos, y la hago llegar a todos los niños en este período: que todos puedan recibir el bautismo".

"Mañana retomamos el camino del tiempo ordinario. no nos cansemos de invocar la luz y la fuerza del Espíritu Santo, para vivir con amor las cosas ordinarias para hacerlas extraordinarias. Cuando se hacen con amor, las cosa ordinarias se hacen extraordinarias", finalizó.

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