En las diócesis de Palencia, Santiago, Bilbao, Salamanca, Segovia y Cuenca Goteo constante de sacerdotes fallecidos a causa del coronavirus en España

Si el grano muere
Si el grano muere

Los funerales de David García Martín se celebrarán cuando sea posible

La Archidiócesis de Santiago informa de que Ramón Barral fue enterrado en la tarde del mismo domingo de su fallecimiento

Los menesianos de Bilbao han perdido a los Hermanos Lucas, Dámaso, Javier, Virgilio y Efrén

También ha fallecido Ángel Frías, consiliario de la Joc y de la ACO y otros de localidades de Salamanca, Segovia y Cuenca

Es constante y diario el goteo de fallecimientos entre el clero español, un colectivo especialmente de riesgo por su elevada edad y por su constante contacto con la gente. No todas las diócesis dan a conocer sus nombres. Publicamos los que nos llegan, como último reconocimiento a su encomiable labor y a su vida entregada.

En el día de hoy ha fallecido, en el Hospital Río Carrión, el sacerdote diocesano D. David García Martín. Nacido en Santana, el 5 de mayo 1937, fue ordenado sacerdote el 29 de junio de 1962.

D. David ejerció el ministerio sacerdotal en distintas parroquias de nuestra Diócesis. Sus últimos servicios como párroco fueron Velilla del Río Carrión y la Parroquia de San Antonio de Palencia hasta su jubilación en el año 2012. Actualmente seguía siendo Consiliario Diocesano de la Hermandad Obrera de Acción Católica (HOAC).

Su cuerpo será incinerado y cuando sea posible se celebrará el funeral en su pueblo, Santana. Descanse en Paz.

David García
David García

El sacerdote Ramón Barral, entre los fallecidos en la residencia DomusVi San Lázaro de Santiago

El sacerdote Ramón Barral, párroco emérito de la parroquia de Santa María de Cruces en A Escravitude, en Padrón (A Coruña), falleció en la mañana de este domingo a los 83 años en la residencia de ancianos DomusVi San Lázaro, en Santiago de Compostela.

Según confirman a Europa Press fuentes eclesiásticas, murió en el propio centro tras ser diagnosticado con coronavirus. A través de su página web, la Archidiócesis de Santiago informa de que fue enterrado en la tarde del mismo domingo en el cementerio de Pantiñobre en Arzúa (A Coruña), donde nació en 1936.

El párroco de San Caetano (Santiago), Víctor Sánchez Lado, ha publicado una carta abierta en la que aseguraba que Ramón Barral "estaba delicado de salud y se vio agravado por el contagio del coronavirus". "Lo trataron en la propia residencia en donde estaba aislado, llevaba varios días que se negaba a comer y estaba alimentado con suero", añade.

Además, lamenta este mismo sacerdote, murió "como tantos en otros sitios", es decir, "sin una familia que lo pudiera acompañar o le pudiera despedir con un beso" debido a las restricciones en las residencias para evitar contagios.

Apóstol Santiago
Apóstol Santiago

En septiembre de 2014, Ramón Barral se encontraba en su casa rectoral y sufrió un brutal asalto por parte de tres personas --según manifestó entonces-- que se saldó con la muerte de su asistenta. Según las investigaciones, que nunca lograron dar con los autores, el robo fue el móvil principal de lo ocurrido.

La parroquia Santiago de Padrón también ha mostrado sus condolencias a través de sus redes sociales: "Lo recordaremos siempre por su bondad y espíritu de servicio, por su cercanía y humildad. Nos deja el testimonio de su profunda fe y filial devoción mariana".

Menesianos de Bilbao

"Se nos han ido los Hermanos Lucas, Dámaso, Javier, Virgilio y Efrén, nuestros abuelos Menesianos", relatan las redes sociales de los Menesianos de Bilbao. Virgilio fue profesor en Santa María Ikastetxea durante años. "Gracias por vuestra vida regalada como Hermanos. Cuidad de nosotros".

(José María Arieta-Araunabeña).- Hoy podría empezar por _“crónica de una muerte anunciada”_ y haceros pasar la noticia de la muerte del Hno. Javier, nuestro ”Javi”. ¡Otra más! y ¡son ya tantas! Y dejar que la angustia, el dolor venido, por venir, sobrevenido... nos ahogase. Pero…. Bendita fragilidad.

_“La tempestad desenmascara nuestra vulnerabilidad y deja al descubierto esas falsas y superfluas seguridades con las que habíamos construido nuestras agendas, nuestros proyectos, rutinas y prioridades. Nos muestra cómo habíamos dejado dormido y abandonado lo que alimenta, sostiene y da fuerza a nuestra vida y a nuestra comunidad.

_Con la tempestad, se cayó el maquillaje de esos estereotipos con los que disfrazábamos nuestros egos siempre pretenciosos de querer aparentar….”, nos dijo el Papa Francisco hace día días.

Estamos así desnudos, faltos de recursos, diezmados, en esperanza menguante, y, en medio de todo, aquí sentimos la llamada poderosa a seguir soñando, a “contar estrellas” como Abrahán.

Sin palabras, con la única palabra del “permanecer”, estar, acompañar con todos, para compartir futuro y sufrimiento. Y la vulnerabilidad de los tiempos nos poda el gesto de ternura, el encuentro físico, el apretón de manos, el beso y la lágrima. Siempre están otras mil formas de presencia para hacer revivir la Presencia.

Me han pasado un vídeo de una entrevista actual de Jordi Évole al Papa Francisco. Gustarlo varias veces. Él así nos acompaña, nos acompañamos todos esperando esa Pascua que está por pujar.

Homenaje a Ángel Frías, consiliario de la JOC y de la ACO

EMBRIAGADO

Su agradecida mirada nos decía

que cuando atravesara el espejo intangible del sueño,

ya no quedaría nada de su imagen.

Que durante un instante

solo podríamos contemplar

su espalda tatuada de ardientes despedidas.

Y así ocurrió.

Cuando pudimos recuperar la palabra sin llanto,

fuimos reviviendo su memoria.

Y esa evocación nos devolvió

tantos brindis y lágrimas y risas y sueños.

Porque nadie se había embriagado y bebido

con tanta intensidad su entera existencia.

Nos preguntamos si en algún momento

se diluiría su recuerdo

entre las brumas del tiempo y el olvido.

Y entonces comprendimos que nada ni nadie desaparece

cuando su mirada se transparenta

en los destellos y las resonancias

que las aguas nos devuelven

desde el curso del manantial de la vida.

(Miguel Ángel Mesa Bouzas)

Ángel Frías
Ángel Frías

Fallece en Salamanca el sacerdote Alfredo Ramajo

Se ha comunicado la muerte del salmantino Alfredo Ramajo, después de luchar durante varios días contra el coronavirus.

Alfredo Ramajo García, (El Sahúgo, 1953), ordenado presbítero en 1979, ha sido párroco de Tenebrón, Morasverdes, Guadapero, Diosleguarde, El Maíllo y Aldehuela de Yeltes.

Caballar lamenta la pérdida del sacerdote Juan Bayona

(El Adelantado).- El pasado sábado por la tarde llegó a Caballar la noticia del fallecimiento del sacerdote Juan Bayona Campos. Bayona sirvió como diácono en esta localidad segoviana, antes de ser ordenado cura en Navafría. Allí comenzó su actividad pastoral en la comarca de Pedraza, para posteriormente ser destinado a Bernardos y finalmente como misionero en Cuba. Hace unos años, por motivos de salud, regresó a Segovia para seguir con el ejercicio sacerdotal.

Bayona, visitado por un grupo en su residencia
Bayona, visitado por un grupo en su residencia

Bayona, junto al sacerdote Félix Velasco, generó una gran actividad entre los jóvenes caballerenses de aquel entonces. Se formó un coro juvenil en la parroquia y muchos de ellos aprendieron a tocar la guitarra. Tal fue su actividad que la agrupación de Caballar, liderada por Bayona, acompañó con su música distintas celebraciones eucarísticas en la zona de la Sierra.

De aquella semilla surgió el año pasado el grupo de trabajo de la localidad que se ha centrado en recuperar y documentar la cultura tradicional de la localidad. Junto a esa triste noticia, también Caballar sufrió el sábado la pérdida del vecino más mayor de la localidad, Vicente Marcos del Río, de 98 años de edad.

Fallece a los 86 años don Jesús Jarabo, sacerdote de la parroquia de San Esteban

(Eldiadigital).- Las víctimas de la pandemia de coronavirus nos dejan cada día tristes despedidas. En esta ocasión nos lamentamos por el fallecimiento de don Jesús Jarabo, sacerdote de la parroquia de San Esteban en Cuenca donde nos ha dejado a los 86 años de edad.

El entierro tendrá lugar en su localidad natal, Caracenilla, de la que siempre presumió en vida y que ahora será el lugar del eterno descanso de sus restos. Y aunque las circunstancias impiden poder acompañarle en su despedida, llegarán días en los que será obligada la visita a este pueblo y la ermita de la que tanto nos habló.

Durante muchos años fue párroco en la localidad de Uclés donde ejerció de profesor en el Seminario Menor Santiago Apóstol donde muchos tuvimos la suerte de conocerle y nos instruyó en los primeros pasos en latín. 

Siempre recordaré sus clases subido a la tarima de madera, con el pequeño libro de latín en las manos, las gafas en la otra y la mirada fija en el infinito. Y por encima de las lecciones de latín, sobresalía las lecciones de vida que nos enseñó. Con genio pero cercano, serio pero siempre de buen humor, dispuesto a escuchar y ayudar en lo que fuera menester. En palabras de otro sacerdote que tuvimos la suerte de conocer, don Francisco Muñoz, era “un santo disfrazado de cura guasón”. 

Hoy la tierra pierde un gran sacerdote, un maestro ejemplar y una bellísima persona. Hoy el cielo recupera uno de sus ángeles. Desde el cielo seguirá haciendo lo que hizo aquí toda su vida, velar por los que más lo necesitan y rezar por todos, como demuestra el vídeo que tan sólo hace unos días grababa en San Esteban dirigido a los fieles. 

"Siempre recordaré sus clases subido a la tarima de madera, con el pequeño libro de latín en las manos"

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