El coronavirus ha llegado a la Iglesia española. Según ha podido confirmar RD, se ha dado el primer caso positivo en la Conferencia Episcopal. Se trata de un trabajador de la Casa de la Iglesia, quien ya este viernes no acudió al trabajo, y que se hizo la prueba porque un familiar suyo se contagió. En estos momentos, se encuentra asintomático.
Al parecer, ningún obispo está afectado, pese a que todos ellos se encontraron, durante una semana, en la Asamblea Plenaria.
A la espera de un anuncio oficial por parte de la Conferencia Episcopal, las únicas medidas se conocieron el viernes, tras la rueda de prensa conclusiva de la Plenaria, cuando la Oficina de Prensa de la CEE envió algunas "indicaciones", como "pautas compartidas por numerosas diócesis y por la Iglesia en España. Son las siguientes:
- Conveniencia de retirar el agua bendita de las pilas que hay en las entradas de las iglesias y en otros lugares de devoción.
- Posibilidad de ofrecer en la celebración de la eucaristía otro gesto de paz distinto al habitual de abrazar o estrechar la mano a los que están próximos.
- Que las personas que distribuyen la comunión durante la de la eucaristía, se laven las manos antes y después de este momento.
- Que las muestras de devoción y afecto hacia las imágenes, tan propias de este tiempo de Cuaresma y en la próxima semana Santa, puedan ser sustituidas por otras como la inclinación o la reverencia, evitando el contacto físico con ellas, y facilitando una mayor rapidez que evite aglomeraciones.
Además de estas, más generales, en algunas diócesis, templos, cofradías o parroquias podrían añadirse otras más específicas, atendiendo a los costumbres propias de esos lugares.