Los que dicen sentirse conmovidos por el sufrimiento del pueblo cubano y que alzan la voz para condenar al gobierno por todo este sufrimiento son las mismas personas que lo han fomentado durante más de 60 años. No me crees, veamos. 

 La gran mayoría de ustedes ha oído hablar de la Revolución Cubana, bajo el liderazgo de Fidel Castro, quien derrocó al dictador Batista del poder en enero de 1959. En ese momento, Cuba era el pequeño paraíso de una mafia internacional que se llevaba bien con Washington. 

Fidel tenía otros proyectos para el pueblo cubano, el de su independencia y soberanía así que el del desarrollo de un pueblo autónomo y orgulloso de lo que hace. Fue entonces cuando el presidente Eisenhower decidió, en enero de 1960, enviar a uno de sus representantes a Cuba para investigar hasta qué punto el Pueblo seguía realmente a Fidel y su proyecto revolucionario. 

El 6 de abril de 1960, Lester D. Mallory, Subsecretario de Estado Adjunto para Asuntos Interamericanos afirmó que "la mayoría de los cubanos apoyaba a Castro" y que "no había una oposición política efectiva", agregando que " las dificultades económicas (…) Cualquier medio para debilitar la vida económica de Cuba debe utilizarse rápidamente(…): 

https://fr.wikipedia.org/wiki/Embargo_des_Unis_Unis_contre_Cuba

Aquí tenemos el camino elegido para contrarrestar los efectos positivos de una revolución, portadora de un gran humanismo. La historia nos dará muchos ejemplos de este humanismo que ha llegado a muchos países de África y América Latina y ha salvado muchas vidas. 

El arma estratégica para combatir esta revolución y su líder se expresa en el relato de Lester D. Mallory, mencionado anteriormente. Esta será la función del embargo, impuesto al pueblo cubano, para, a la larga, desilusionarlo de sus dirigentes y de la revolución. En esto no perderán la oportunidad de hacerlo. Que la gente estuviera sufriendo, que pasara hambre, que se les retuvieran las medicinas y que la economía se pusiera patas arriba, no molestó a nuestros buenos samaritanos de ninguna manera. 

"" La única forma predecible de reducir el apoyo interno era a través del desencanto y el desánimo basado en el descontento y las dificultades económicas (...) Cualquier medio para debilitar la vida económica de Cuba debe utilizarse rápidamente (...): negarse a hacer crédito y abastecer a Cuba para bajar los salarios reales y monetarios en un intento de provocar hambre, desesperación y el derrocamiento del gobierno. "

Esto es lo que los buenos samaritanos de hoy ya habían planeado durante años: una desilusión, alentada y apoyada por ellos. 

Hoy, parte del pueblo cubano que se encuentra desencantado con su gobierno. Se ha convertido, a través de los medios de comunicación, con la gran expresión de un pueblo que se vuelve contra su gobierno y su revolución. Vean la respuesta del pueblo fidel a su gobierno y a su revolución:

Pueblo cubano sale a las calles a defender la Revolución

 Una gran parte del Pueblo se mantiene en solidaridad con su gobierno y conoce las entrañas de un imperio que no deja de acosar al pueblo para ponerlo en contra de su gobierno. Los medios están ahí para amplificar los conflictos y los buenos samaritanos para exigir nuevas elecciones bajo el control de observadores internacionales. 

Washington también puede contar con el apoyo del Vaticano y del episcopado cubano, quienes han olvidado la existencia de un bloqueo económico contra Cuba que es fuente de muchos problemas. La palabra "bloqueo contra Cuba" simplemente no existe en sus declaraciones. 

Como dijo el presidente cubano esta mañana, este es un golpe que Washington está tratando de aprobar sin problemas. 

https://www.telesurtv.net/news/cuba-presidente-diaz-canel-plan-golpe-suave-bloqueo-eeuu-20210714-0033.html (en español) 

Recientemente, una gran mayoría de estados de todo el mundo, incluidas las Naciones Unidas, votaron a favor de que Estados Unidos pusiera fin a este embargo criminal contra un pueblo cuyas obras humanitarias son un ejemplo para muchos pueblos.