NO SE PUEDE TENER DOBLE LENGUAJE CON LOS PUEBLOS

Hoy, mas que nunca, lo que cuenta es la credibilidad. Las posiciones políticas y religiosas, como las en el campo social se fundamentan, en general, en ciertas ideologías, disimuladas, con las cuales no todos coinciden. El compromiso del episcopado venezolano va por la ideología neoliberal, de  formato capitalista alineado con los postulados del neoliberalismo. Sus silencios sobre el intervencionismo de Estados Unidos y las sanciones y todas las amenazas de intervencionismo son hechos de que no hablan los obispos de Venezuela. Sus silencios se entienden como un lenguaje de la complicidad. Ya se sabe que la credibilidad se fundamenta sobre la verdad, toda la verdad.

doble lenguaje

Tomo como ejemplo al Episcopado venezolano que se hace muy activo en el campo político y social. No es el unico, pero en él los contrastes se ven claramente. 

De un lado, ese episcopado se dice profundamente triste de la miseria en la cual el pueblo venezolano se encuentra. Les faltan palabras para expresar todo el sufrimiento que comparten con el sufrimiento del pueblo,  es un melodrama que tiene como fin la opinión publica mundial, en el país muy poca gente les cree. 

Venezuela vive una emergencia humanitaria”, ha sido el grito de angustia y dolor del episcopado en la más reciente Carta Fraterna de los obispos venezolanos dirigida a las iglesias hermanas de América y del mundo, publicada el pasado 10 de enero de 2020. Se trata de una emergencia ocasionada por “la imposición de un sistema ideológico”, el castro-comunismo en su mutación denominada Socialismo del Siglo XXI, que ha traído consigo “el aumento de la desnutrición infantil, la destrucción del aparato productivo y el crecimiento de una especulación agobiante”, 

Los obispos, aunque quisieran, no pueden decir más. Ahora hace falta que el régimen reconozca esta dramática realidad que ninguna propaganda puede ocultar y que se agrava de día en día. Somos el país con menor salario, mayor hiperinflación, mayor decrecimiento de la producción, más incremento de la pobreza y mayor huida del país.

Del otro lado, mantienen un silencio sagrado sobre todas las sanciones impuestas por Estados Unidos y sus aliados.Manipulan de ese modo al pueblo para que se le eche la culpa al gobierrno y se rebele contra él.  La lista de las sanciones es bastante larga: congelado de mas de 166 mil millones de dólares que el gobierno no puede utilizar para comprar alimentación, medicamentos, a eso se añade cierre de todo comercio de compra de petrolero de parte de E.U., cierre de venta de petrolero a otros países y mas…. 

« El castigo más brutal vino en enero de 2019, cuando Washington cerró a Caracas su mercado más importante de petróleo. Estados Unidos compró un promedio de 586 mil barriles de crudo diariamente en 2018, pero para el 15 de marzo de este año esa cifra se redujo a cero. Y Washington presionó a otros países y empresas para que cancelaran sus operaciones con Venezuela o se hicieran acreedores a sanciones adicionales. »

Es claro que todo eso tiene un impacto económico importante en el desarrollo del país y en los servicios esenciales para las necesidades del pueblo. 

Uno se pregunta ¿por qué el episcopado que sufre  tanto de la miseria del pueblo, no dice nada de esas sanciones, ilegales, que afectan directamente al pueblo, a todos los niveles? 

“José Luis Azuaje Ayala, presidente de la Conferencia Episcopal Venezolana, denunció a la Brújula Cotidiana la angustia que enfrenta todo el país y el gran sufrimiento de la Iglesia: “Producimos petróleo, pero no tenemos gasolina, ni electricidad ni medicamentos. La Iglesia está pagando un costo muy alto: hay deserción en las escuelas, hay obras católicas que han tenido que cerrarse y muchos sacerdotes han tenido que irse”. Y sobre Maduro: El régimen es ilegítimo, la Iglesia y el pueblo sufren las consecuencias” del castro comunismo.”.

¿Por qué ese silencio sobre estas sanciones que son como un elefante que esta en el patio atrás de Venezuela? Ven muchas cosas negativas relacionadas al gobierno y no ven ese elefante que hace todo para que la revolución que dio educación gratuita, salud gratuita, mas de tres millones de habitaciones dignas para familias humildes etc. De eso no les gusta hablar a los obispos y tampoco dicen nada los jesuitas, salvo uno, en la persona del padre Numa Molina, que vive cerca del pueblo y es coherente con la realidad. 

No podemos olvidar que el mismo episcopado se hizo presente, en abril 2002, como colaboradores directos para realizar para dar un golpe de estado contra el presidente Hugo Chávez. Hasta se hicieron cómplices con Carmona, que se autoproclamó como presidente, anulando la Constitución que recién el pueblo se había dado por referéndum. No se hablaba de democracia en aquel entonces.

Vemos, en el caso, de este episcopado que el discurso desarrollado encuentra sus raíces profundas en su ideología neoliberal , de formato claramente imperial. Su alianza con Washington y la oposición la mas radical tiene por objetivo la eliminación del socialismo del siglo XXI, puesto en marcha, en 1998, bajo el mando del presidente legitimo, Hugo Chávez, y del Pueblo venezolano, 

Para los obispos venezolanos, lo que realmente importa, no es el bien del pueblo, ya que a los pobres les mencionan en sus documento, solo  con una doble intención:  buscar credibilidad y ser aceptado por el papa Francisco. Su verdadera fin es que sea eliminada la revolución bolivariana a la que catalogan de comunista y castro-chavista.No se trata de humanismo, sino de política y de ideología. En eso se utiliza, de forma manipuladora, la religión para mejor  conseguir sus objetivos. El pastor que sirve dos señores a la vez, no puede servir su pueblo con credibilidad.

No hay que sorprenderse si el pueblo , en su mayoría, y muchos otros en el mundo no les reconocen ninguna credibilidad tanto como pastores y menos como políticos.  No basta hablar de su verdad solamente cuando se le conviene, sino se necesita hablar de "toda la verdad" que les guste o no.  

Les dejo con ese análisis del pensamiento del papa Juan XXIII

https://humanisme.blogspot.com/2014/04/jean-xxiii-precurseur-du-socialisme-du.html

Oscar Fortin

31 de julio 2020

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