El imperio a la puerta de Venezuela

Desde las declaraciones recientes del Papa y de Michel Bachelet así que la declaración del Episcopado venezolano, uno puede pensar que se esta preparando el camino a la intervención del Imperio. La presencia en Colombia  de  Robert O’Brien, asesor de Seguridad Nacional de Estados Unidos; Craig Faller, jefe del Comando Sur de EE.UU.; Mauricio Claver-Carone; y el embajador de ese país en Colombia, Philip Goldberg. Los 5000 soldados de E.U. que están en Colombia desde enero 2019, ya están listos para pasar al acción. 

pueblo de Venezuela el primero de mayo

Un recorrido de 22 años para vencer a un pueblo y contaminar por todos los medios a su alcance el desarrollo normal de la Revolución bolivariana. Ya conocemos la manera por la cual el imperio trata de echar por abajo todo éxito revolucionario al servicio prioritario de los intereses del pueblo.

Por sus bloqueos y sanciones logra paralizar el desarrollo económico y las conquistas sociales en los campos de la salud, de la alimentación, de la educación y del alojamiento. La imagen que ilustra bien esa forma de impedir todo éxito de la revolución es la del arena que se echa en el engranaje de un motor y del agua que se echa en el estanque  de gas. Así, el competidor y el autor de los hechos puede decir que ese tipo de coche no sirve por nada, que sus constructores contaminaron tanto el motor que el gas, fuente de su energía.   

Es lo que el imperio y sus subordinados hacen desde 22 anos para que el proyecto de la revolución bolivariana no de los frutos esperados. Son los mismos que dicen que todo es de la culpa del gobierno. 

O’Brien dijo en una rueda de prensa que seguirán manteniendo la “máxima presión” sobre el gobierno de Nicolás Maduro, que ha “destruido el país y su economía y empobrecido a los venezolanos“,

Es el mensaje que mandan al mundo y que sus colaboradores que vienen del grupo de Lima, del Episcopado venezolano y del Vaticano entre otros repiten al mundo entero. 

Vale la pena recordar aquí, la respuesta dada a Eisenhower por su subsecretario de Estado Adjunto, de vuelto de un viaje a Cuba: 

“El 6 de abril de 1960, Lester D. Mallory, Subsecretario de Estado Adjunto para Asuntos Interamericanos afirmó que "la mayoría de los cubanos apoyaba a Castro" y que "no había una oposición política efectiva", agregando que "la la única forma previsible de reducir el apoyo interno era a través del desencanto y el desánimo basado en la insatisfacción y las dificultades económicas (…) Cualquier medio para debilitar la vida económica de Cuba debe utilizarse rápidamente (…): negarse a dar crédito y 'abastecer a Cuba para bajar los salarios reales y monetarios con el objetivo de provocar hambre, desesperación y el derrocamiento del gobierno. "

El imperio no ha cambiado y sigue haciendo danos profundos, bajo de la mesa, a los gobiernos y pueblos que no le son sometidos para después declarar que son esos gobiernos que están detrás de todos eso problemas. Mas aun se presenta como un salvador de los pueblos hambrientos y enfermos. Recibe apoyo de sus aliados dentro de los cuales no se puede ignorar el Vaticano y los episcopados. 

El montaje de la información difundida por el sistema imperial y sus aliados es que el dictador, Nicolás Maduro, es un tiran que llevo a su pueblo a la mas profunda miseria. Se trata de una revolución que ha fallido y que los pueblos merecen mas que eso.

Por supuesto que no dirán los intereses   que representa Venezuela con sus fuentes de petrolero, sus minas de oro y de diamante entre otras. Basta mirar lo que recién sucedió en Bolivia con la complacencia de sus aliados: un golpe de Estado que le permite volver a tomar el control de las riquezas del país, incluyendo el Lithium, fuente de energía electica. 

Conclusión

 El imperio no actúa en función de los derechos humanos, del bien estar de los pueblos y, aun menos en promoción de la democracia. Su actuación es función de los intereses que representan los Estados para él: riquezas minerías incluyendo las reservas de petrolero, puede ser también un interés geopolítico que puede representar un Estado,. 

Todo su discurso de promotor de la democracia, del respeto de los derechos de las personas y de los pueblos etc. no es otra cosa que el humo que impide ver lo que hay del otro lado. 

Yo lamento que el Vaticano y los episcopados caen en la trampa del discurso del imperio. Aun se hacen activos para promoverlo. 

Todo lo que espero es que los aliados del imperio tomen consciencia de lo que permite y no permite el derecho internacional bajo la autoridad des las Naciones Unidas. Uno no puede intervenir donde le da la gana sin el acuerdo del Consejo de seguridad de las Naciones unidas. En el caso de Venezuela, Estados Unidos no tiene el acuerdo de las N.U..

Oscar Fortin 

16 de agosto 2020

Volver arriba