Abrazar y vivir Querida Amazonía, este es el propósito de la Versión Popular de la exhortación del Papa Francisco lanzada por la Red Eclesial Pan Amazónica – REPAM este 2 de abril. Se trata de un instrumento, al que se tendrá acceso tanto virtual como en papel, aunque esta versión sólo estará disponible una vez que las circunstancias por las que la humanidad está pasando en consecuencia del Covid-19 lo hagan posible.

Este instrumento va a ayudar, como reconoce Mauricio López, Secretario Ejecutivo de la REPAM, en el avance del “complejo y hermoso proceso Sinodal, el cual apenas comienza en su fase más importante de llevar a la vida los frutos de su discernimiento”, recogiendo la unión entre lo vivido en el Vaticano II, en la Iglesia latinoamericana y en territorio amazónico.

Lo más destacado de todo este proceso es, sin duda, todo lo que hace referencia a “una convergencia con sus pueblos y comunidades, sus gritos y esperanzas, y la vida donada de tantos mujeres y hombres que, en seguimiento del llamado de Cristo en opción por el Reino, se han entregado por este lugar que es misterio sagrado”, según el Secretario Ejecutivo de la REPAM, que descubre en la Amazonía, “un rostro concreto que trae vida”, pero que al mismo tiempo “nos abre nuevas posibilidades y nos confronta con la urgencia en medio de una verdadera crisis, tanto climática, como social, cultural y política”.

Podemos decir que el Sínodo para la Amazonía ha cambiado las tornas, que ahora es la periferia la que hace un regalo al centro, entrando así en una dinámica del Evangelio “en el que los márgenes iluminan con una nueva luz para la conversión integral del centro”, según Mauricio López. Él nos hace ver “una genuina actitud de escucha y respeto, y sobre todo de valentía” por parte del Papa Francisco, que nos ha ayudado a tejer cuatro conversiones: pastoral (Iglesia en salida misionera, que anuncia la alegría del evangelio en el respeto de las culturas); cultural (sin miedo a lo diverso y reconociendo la presencia de Dios en el diálogo intercultural); ecológica (descubriendo el rostro de Dios en todo lo creado); y sinodal (caminar más juntos, escuchar, crear nuevas posibilidades que lleven al Reino).

La Versión Popular integra el Documento Final y la Exhortación Apostólica, pues, según Mauricio López, “uno sin el otro no está completo”, lo que demanda que sean trabajados siempre de manera conjunta, dado que el Documento Final marca el programa a seguir para los próximos años, y en Querida Amazonía, Francisco nos llama a “acompañar sus sueños (social, cultural, ecológico y eclesial) que son sus directrices mayores para la Iglesia en la Amazonía y en todo el mundo”.

El instrumento presentado por la REPAM también consta de una Guía Metodológica, que ayude a llevar de vuelta al territorio todo lo surgido de las discusiones durante la Asamblea Sinodal, que, no olvidemos, tuvo como elemento inicial la escucha a los pueblos que habitan ese territorio. Allí se pueden encontrar sugerencias para “ayudar en cada una de sus respectivas realidades (familia, grupo, parroquia, comunidad o jurisdicción eclesiástica) para apropiarse de la riqueza de esta experiencia Sinodal, y animar a que se haga vida en cada lugar según sus propias posibilidades y urgencias”, insiste Mauricio López.

No podemos olvidar que el propósito final de esta Versión Popular es una invitación para actuar, que sea un llamado, afirma Mauricio López, “a todos los miembros de nuestra REPAM, a los hermanos y hermanas de Iglesia, y a todas las personas de buena voluntad, a acoger esta Exhortación Apostólica y el Documento Final para leerlos, orarlos, estudiarlos, discernirlos, compartirlos, y, sobre todo, a asumirlos como compromiso para actuar en favor de la vida y vida en abundancia para esta Amazonía, y para las futuras generaciones en este territorio y del mundo”.