Horror en Passau: El 38 % de los padres de niños agredidos por los curas fueron cómplices de los abusos

Abusos sexuales en Alemania

700 niños fueron abusados en la diócesis alemana desde 1945, según un informe, que ha hallado un alto índice de complicidad en los padres: en dos casos, las familias ofrecieron a sus hijos a los sacerdotes

El informe sobre abusos en la diócesis de Passau
El informe sobre abusos en la diócesis de Passau | DdP

“Un capítulo muy duro” ante el que “sólo puedo pedir perdón”. Así, compungido, presentó el pasado 8 de diciembre el obispo de la diócesis alemana de Passau el informe de más de 400 páginas en el que se analizaba, por parte de un equipo de la Universidad de Passau, los abusos sexuales perpetrados por sacerdotes en los últimos 80 años.

El resultado era desolador. “A través de una cultura del silencio, la glorificación del sacerdote y la indiferencia hacia el sufrimiento de las víctimas, al menos 700 personas han sufrido un tormento indescriptible, con consecuencias que a menudo duran toda la vida”, reconocía el obispo Stefan Oster. 

Según el estudio, 154 sacerdotes sacerdotes diocesanos o religiosos fueron acusados o condenados, lo que representa el 5,3% del número total de sacerdotes durante este período y es ligeramente superior a las cifras recabadas en otros informes de otras diócesis germanas.

Los "espectadores"

Siendo ya los datos suficientemente espeluznantes, el informe que dirigió el profesor Marc von Knorring y su equipo, titulado “Abuso sexual y violencia física: Agresiones a menores por parte del clero católico en la diócesis de Passau, 1945-2022” recoge también un capítulo que es particularmente revelador sobre la cultura del silencio y el encubrimiento que permitió la impunidad en la comisión de semejantes delitos: el papel de los llamados bystanders (espectadores), palabra que procede de la investigación del Holocausto en inglés para designar a aquellas personas o grupos que están indirectamente involucrados en los hechos y que participaron como cómplices.

El obispo Stefan Oster
El obispo Stefan Oster | BP

“El estudio se pregunta: ¿Qué pasa con las personas que presencian algo o que viven cerca de las víctimas o los acusados? ¿O con quienes se enteran más tarde y actúan? Entre estas personas se incluyen, por ejemplo, familiares de las víctimas, voluntarios activos en parroquias, sacristanes y personal de limpieza parroquial, figuras de autoridad en las comunidades como alcaldes, maestros de escuela y otros”, señala el obispo Oster en su comunicación a la diócesis.

“El hallazgo inquietante es que hasta aproximadamente el año 2000, las mentalidades predominantes a menudo también propiciaban la perpetración. Los actos no se creían, no se consideraban posibles, o se negaban. La posición de un sacerdote parecía estar por encima de toda sospecha. O bien, las personas que tenían algo que decir temían la exposición pública y las consecuencias sociales para ellos mismos. Además, la sexualidad como tema público seguía siendo tabú, al menos en las comunidades católicas rurales, y el abuso sexual aún más”, añade el obispo.

Entregados por sus familias

Se trata de un elemento adicional absolutamente dramático. El estudio del profesor Von Knorring revela que el 38 % de los  esos “espectadores”, que en su mayor parte eran cómplices, eran los propios padres de las víctimas de abuso y violencia. Pero siendo esto terrible, lo es aún más otro dato que han encontrado los investigadores tras revisar 2.400 expedientes personales de sacerdotes conservados en los archivos diocesanos y entrevistar a 25 víctimas y una treintena de testigos: en dos casos, los niños fueron entregados por sus familias de manera voluntaria y consciente a los sacerdotes para ser abusados.

El estudio reveló que, hasta el año 2000, las familias temían las repercusiones derivadas de la presentación de denuncias oficiales contra el clero por abuso o violencia. Era el manto del clericalismo –tan combatido por el difunto papa Francisco, como reconoce el propio obispo de Passau, que lo pone de ejemplo– que lo envolvía todo y hacía al sacerdote un ser prácticamente intocable. Afortunadamente, constata el informe, desde entonces los padres de niños abusados han demostrado un enfoque significativamente más proactivo contra el abusador.

Religión Digital es un proyecto independiente, en manos de sus socios, colaboradores, anunciantes y amigos. Solo con tu ayuda podemos seguir haciendo realidad la Iglesia de Jesús. Por una Iglesia informada.
CREEMOS. CRECEMOS. CONTIGO. HAZTE SOCIO/A AHORA

También te puede interesar

Lo último

stats