Salwan Momika deberá abandonar el país cuando finalice su permiso provisional y no podrá volver en diez años Un refugiado iraquí autor de varias quemas del Corán será expulsado de Suecia

Oficina sueca de migración
Oficina sueca de migración

Salwan Momika, refugiado iraquí autor de varias quemas del Corán que provocaron un conflicto diplomático con el mundo islámico el pasado verano, será expulsado de Suecia al decidir las autoridades migratorias no prolongar su permiso de residencia

El motivo de la revocación de su estatus actual es haber facilitado información "incorrecta" sobre su necesidad de protección al presentar su solicitud de asilo en Suecia

"No me iré de Suecia, viviré y moriré en Suecia. Migraciones ha cometido un grave error. Sospecho que hay manos políticas ocultas detrás de esta decisión. Tomaré medidas legales", declaró a la televisión pública SVT Momika

Salwan Momika, refugiado iraquí autor de varias quemas del Corán que provocaron un conflicto diplomático con el mundo islámico el pasado verano, será expulsado de Suecia al decidir las autoridades migratorias no prolongar su permiso de residencia.

Momika deberá abandonar Suecia cuando finalice su permiso provisional de tres años en abril de 2024 y no podrá ingresar en este país escandinavo durante un lustro.

El motivo de la revocación de su estatus actual es haber facilitado información "incorrecta" sobre su necesidad de protección al presentar su solicitud de asilo en Suecia, explicó al canal TV4 un portavoz de la Dirección General de Migraciones, que aludió a cuestiones de confidencialidad para no dar más detalles.

Momika saltó a las portadas de los medios suecos hace unos meses cuando quemó un Corán frente a la principal mezquita de Estocolmo y, posteriormente, la embajada iraquí y el Parlamento, actos que tuvieron repercusión en el mundo islámico y generaron protestas diplomáticas, disturbios y amenazas de boicot económico.

Las vejaciones contra el libro sagrado de los musulmanes también fueron motivo de queja de Turquía para retrasar la ratificación parlamentaria del ingreso de Suecia en la OTAN, que debe ser aprobado por todos los países miembros.

El primer ministro sueco, Ulf Kristersson, llegó a afirmar en agosto pasado que Suecia estaba en la "peor" situación de seguridad desde la II Guerra Mundial (1939-45).

Las quemas, cuyo autor justificaba por su oposición al Islam, se siguieron repitiendo en los últimos meses, mientras Migraciones reabría su expediente tras recibir nuevas informaciones.

Momika fue relacionado con las Fuerzas de Movilización Popular (FMP), una coalición paramilitar de milicias iraquíes que luchaban contra el grupo Estado Islámico (EI), pero él negó cualquier vínculo, aseguró haber liderado un partido político en su país y se consideraba un asilado político.

"No me iré de Suecia, viviré y moriré en Suecia. Migraciones ha cometido un grave error. Sospecho que hay manos políticas ocultas detrás de esta decisión. Tomaré medidas legales", declaró a la televisión pública SVT Momika, de 37 años y que llegó a Suecia hace cinco años.

Momika se ha declarado ateo, aunque anteriormente se confesó cristiano, y simpatizante del ultraderechista Demócratas de Suecia (SD), segunda fuerza política sueca y apoyo externo del actual gobierno de derecha que encabeza Kristersson. 

Policía de Suecia

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