"Empujar la historia hacia su destino último: Cristo y su Reino" ¿Qué es ser cristian@ a día de hoy?

"Podríamos considerar cristian@, no por su afiliación a Cristo o por sus creencias sino por su vida al servicio de los valores del Reino de Dios, al fin y al cabo fue por ello por lo que Jesús dio su vida"
"En Jesús de Nazaret se da algo que yo no he conocido en persona humana alguna, su proyecto de vida y de sociedad se confunde con su persona"
| Julio Guerrero
Se entiende que ser cristian@ es ser discípulo de Jesús de Nazaret, incluso algún@s exigen que se crea en Él como si de un ser divino se tratara, etc. Desde luego que es mi caso. Si a las creencias hay que atender, yo creo en la Trinidad de un Dios Único, y que Jesús es el Cristo, pero, me pregunto si después de dos milenios de cristianismo habría que reconsiderar esta acepción.
Y por qué digo esto, sencillamente porque he conocido y conozco personas que son mejores que yo, más entregadas a l@s demás, más buenas y más luchadoras por los valores del Reino de Dios, y es aquí donde debo detenerme.
Podríamos considerar cristian@, no por su afiliación a Cristo o por sus creencias sino por su vida al servicio de los valores del Reino de Dios, al fin y al cabo fue por ello por lo que Jesús dio su vida.

Como digo llevamos más de dos mil años de cristianismo, y a pesar de los pesares, los valores evangélicos son valorados directa o indirectamente por todo el mundo, al menos una inmensa mayoría: cuidar a l@s enferm@s, ayudar al prójimo, igualdad de género, igualdad de derechos, ayudar a quienes lo necesiten, amar sin discriminar, etc. Es cierto que existe alguno más elevado como el amor a los enemigos o amar como Jesús nos amó que aún quedan por entrar en nuestro subconsciente colectivo, pero en su mayoría sí que son compartidos, al menos así lo veo yo.
Pues bien, en Jesús de Nazaret se da algo que yo no he conocido en persona humana alguna, su proyecto de vida y de sociedad se confunde con su persona, es decir creer en Él significa creer en su doctrina, pero también a la inversa, a pesar de que no se reconozca como tal, es decir, seríamos cristian@s si avanzamos en el Reino de Dios en la historia, a pesar de no reconocer al Maestro que los inició y promulgó.
Finalmente, podríamos preguntarnos qué interés tiene ser o no ser cristian@, pues en principio ninguno, “a priori”, sin embargo, sí que lo es para aquellos a quien por decir que creen en Jesús, ponen todo su énfasis en la “sola fide”, y olvidan su mensaje, se creen mejores que los demás, pero hacen muy poco o nada para la construcción del Reino, luchando contra el feminismo, o contra la justicia social, abogando por sistemas políticos y sociales que tratan de detener la historia hacia su destino último: Cristo y su Reino.
Etiquetas