La intuición une, la lógica divide
Mirar es renacer
Soneto a al símbolo de nuestra liberción
AL ÁRBOL DE LA CRUZ
De tu dolor, del tiempo amanecido,
de una palabra ardiente que encendía;
de las entrañas puras de María
y del amor hasta la esencia herido;
desde tu cuerpo tres veces caído
y la noche oscura de la sangre mía,
devuelves con tu cruz a la armonía
este mundo que nace en tu alarido;
este mundo que abarcas con tu abrazo
y limpias con tu muerte de tristeza,
este miedo a vivir esta pobreza
que florece en tu árbol cual si fuera
hontanar para siempre en tu regazo
al colgar de tu cruz mi primavera.
Pedro Miguel Lamet
También te puede interesar
La intuición une, la lógica divide
Mirar es renacer
Pequeñas meditaciones
Diez píldoras de Adviento
Verdaderas causas de un atropello
¿Por qué fue expulsada y extinguida la Compañía de Jesús?
En el día de difuntos
Morir a gusto
Lo último
Reflexiones sobre la situación de los defensores de Derechos Humanos y Ambientales
Aniversario de la Campaña "La vida pende de un hilo": "No podemos darle la espalda a una comunidad agredida, criminalizada y perseguida"