El Centro de Humanización de la Salud cumple 30 años

"Un Centro soñado para humanizar los entornos del sufrimiento originado por la enfermedad, el final de la vida, la pérdida de un ser querido..." Así lo pensaron en su día, hace ya 30 años, un grupo de religiosos camilos, con José Carlos Bermejo a la cabeza.

Dicho sueño ya es toda una realidad consolidada, es el Centro de Humanización de la Salud, y así lo estamos festejando en este 2019.

El pasado viernes 26, un grupo de casi 100 personas vinculadas profesional y personalmente con el Centro y su andadura, se reunieron para celebrar este "cumpleaños" de forma oficial, y muy familiar y cercana.

Profesionales y voluntarios de la casa, "escuchas" del Centro de Escucha San Camilo, profesores, colaboradores de la Revista HUMANIZAR, del pasado y del presente, se dieron cita en la madrileña sede de Tres Cantos.

Humanizar los entornos del sufrimiento

Tal y como recordó Bermejo en sus palabras y este entrañable vídeo, "hace 30 años los camilos tuvimos un sueño", basado en el carisma de la Orden, que consiste en "cuidar a los enfermos, y enseñar un modo evangélico, entrañable, de cuidar y de servir a los enfermos".

"Juntos pensamos que podíamos crear un centro dedicado, expresamente, a la generación y a la transmisión del conocimiento, la cultura, la experiencia adquirida, para humanizar los entornos de sufrimiento con ocasión de la enfermedad y otras circunstancias, como es el final de la vida y la pérdida de un ser querido..."

Echando la vista atrás, rememoramos cómo "aquél sueño lo compartimos con seglares, enseguida arrancamos una acción formativa. Creimos que había que escribir, por eso soñamos la Revista HUMANIZAR, una cabecera que nos conmovió a todos y nos apasionó; no tardamos en publicar libros con editoriales y ditribuirlos más allá de nuestras fronteras...no tardamos en 1997 en crear

un centro específico para acompañar a personas que tenían el corazón roto, por la pérdida de un ser querido",desgranaba Bermejo.

Esa "pata" se completa y combina a la perfección con la otra "pata", la del Centro Asistencial: las dimensiones culturales, formativas, de investigación, de acompañamiento, de espiritualidad, se funden con éxito.

El mensaje agradecido del evento, en el que también se ofreció la Memoria 2018 a los presentes, se repitió entrañablemente: "que Dios bendiga nuestro proyecto". Y desde HUMANIZAR apostillamos: "y que cumpla muchos más".