Con un emotivo acto en la LXXXIV Asamblea General Cáritas rinde homenaje a sus voluntarios "por acoger a miles de corazones rotos por la DANA"

Cáritas rinde homenaje a sus voluntarios
Cáritas rinde homenaje a sus voluntarios

El presidente de Cáritas Española asegura que las personas voluntarias "merecen un reconocimiento especial porque estuvieron y siguen estando en primera línea"

La emoción dominó todo el acto, que arrancó con un vídeo para recordar al auditorio lo sucedido aquellos días y para poner en valor el trabajo realizado por el voluntariado

Un grupo de voluntarios también tomó la palabra para compartir con todos los miembros de la Asamblea cómo transcurrieron aquellos difíciles días y lo que ha significado para ellos la labor realizada durante estos meses de apoyo a las personas más vulnerables

(Cáritas).- La LXXXIV Asamblea General de Cáritas, que se reúne estos días en El Escorial, rindió un homenaje especial a todas las personas voluntarias que siguen acompañando ocho meses después a las víctimas de la DANA, registrada en octubre del año pasado en Valencia, Letur (Albacete), Mira (Cuenca), Málaga y Jerez. Gracias a su valiosa entrega, las cinco Cáritas afectadas han conseguido acompañar a más de 16.300 personas con una inversión total de más de 10 millones de euros.

La emoción dominó todo el acto, que arrancó con un vídeo para recordar al auditorio lo sucedido aquellos días y para poner en valor el trabajo realizado por el voluntariado. La emergencia provocada por las graves inundaciones supuso un enorme reto para las Cáritas más afectadas debido a la gestión por primera vez de una crisis humanitaria de dimensiones colosales, que puso en tensión su capacidad para dar respuesta a las necesidades de las numerosas víctimas.

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La ceremonia estuvo presidida por la secretaria general, Natalia Peiro y el presidente, Manuel Bretón, y contó con la intervención de varios voluntarios y de los directores ysecretarios generales de las cinco Cáritas afectadas: Rosa García (Albacete), Aurora Aranda (Valencia), María Paz Ramírez (Cuenca), José Miguel Santos (Málaga) y Milagros Díaz (Jerez).

Natalia Peiro. Cáritas Española Secretaria General | Cáritas

"Somos una gran familia"

La primera en tomar la palabra fue Aurora Aranda, la directora de Cáritas Valencia, la

región que se llevó la peor parte de la tragedia con más de 200 personas fallecidas y cuantiosas pérdidas materiales. Con la emoción a flor de piel, la directora destacó “el

poder del voluntariado. Se me pone la piel de gallina porque los voluntarios tienen un gran valor”, aseguró. Con las lágrimas contenidas, Aranda agradeció el apoyo recibido por toda la red Cáritas. “Somos una gran familia. Todos estos meses nos hemos sentido acompañados en lo personal, en lo económico y en la oración”, aseveró con la voz entrecortada. 

Milagros Díaz, secretaria general de Cáritas Jerez destacó, por su parte, que esta experiencia ha supuesto un crecimiento en la fe, ya que “mientras entraba el agua en las casas también entraba la esperanza en el corazón”. “La respuesta fue inmediata gracias a los voluntarios. Dimos lo que esperaban de nosotros: acogida, presencia y acompañamiento. Cada ratito de escucha sirvió para la reconstrucción de la confianza de las familias afectadas. La tormenta pasó, pero el amor en medio del barro permanece”, señaló.

Desde Cáritas Cuenca, su secretaria general, María Paz Ramírez, aseguró que “Cáritas y la parroquia han salido reforzadas” de la emergencia causada por la DANA. “Hemos sido los únicos que hemos estado y hemos visitado a cada una de las 152 familias afectadas junto con el párroco”, apuntó.

Rosa García, directora de Cáritas Albacete explicó que la emergencia provocada por la DANA en Letur supuso un aprendizaje y un cambio sobre la imagen que se tiene de la institución, ya que pasó de ser una organización financiada a ser financiadora. “Eso ha tenido sus resistencias porque es difícil digerir cuando Cáritas se cambia de papel. De la mano de las administraciones y de las Consejerías oportunas hemos ayudado a las

familias, a las empresas, a pequeños negocios y hemos cofinanciado un centro de día para personas mayores”, apuntó.

José Miguel Santos, director de Cáritas Málaga, indicó que “en momentos de dificultad y de emergencia la unión de la confederación es muy necesaria para poder prestar apoyo a las personas en su sufrimiento.

"Auténtico tsunami humano de solidaridad"

Durante el acto, un grupo de voluntarios también tomaron la palabra para compartir con todos los miembros de la Asamblea cómo transcurrieron aquellos difíciles días y lo que ha significado para ellos la labor realizada durante estes meses de apoyo a las personas más vulnerables.

En el marco del Jubileo de la Esperanza, convocado por el Papa Francisco, las personas voluntarias coincidieron en que el compromiso y la entrega de la comunidad cristiana ha sido y sigue siendo un gran signo de esperanza para las víctimas y para toda la sociedad.

Cáritas rinde homenaje a los voluntarios que siguen acompañando a las  víctimas de la dana | Valencia Plaza

La DANA fue el momento de mostrar por qué estamos llamados a ser sembradores de esperanza. Ser voluntario de Cáritas no es un oficio, tampoco es un cargo institucional. El voluntario solo entiende de trato entre personas. Desde nuestra Cáritas y de la mano de Cáritas Diocesana Valencia nos lanzamos aquellos días para poder estar al lado de todos los que vinieron a pedir ayuda”, aseguró Vicente Osca, director voluntario de Cáritas Parroquial de Guadassuar, perteneciente a la Diócesis de Valencia.

Vicente Osca definió la labor de aquellos días como “de máxima responsabilidad” por la enorme confianza depositada en la institución por parte de muchos particulares y empresas que no dudaron en facilitar recursos y fondos económicos. “Fue un auténtico tsunami humano de solidaridad en la que la sociedad mostró su mejor cara.

Gracias a la generosidad de miles de personas, Cáritas sigue acogiendo hoy a miles de corazones rotos por la DANA, aseguró.

En torno a unas 500 personas -de las cuales 193 se mantienen activas- arrimaron el hombro desde las comunidades parroquiales de toda la diócesis de Valencia para acompañar a las víctimas que perdieron a sus familiares, sus hogares y sus medios de vida. La enorme solidaridad del voluntariado se hizo sentir también en Letur (Albacete), Málaga, Mira (Cuenca), Málaga y Jerez.

"Un golpe en el estómago"

José Carlos Hernández, voluntario de Cáritas Jerez, recuerda aquellas jornadas “tan duras” de finales de octubre como “un golpe en el estómago” que le impulsó a salir al encuentro del “sufrimiento ajeno”. “Fue en ese dolor compartido cuando mi corazón no dudó. Mi respuesta -añadió- fue un rotundo, inmediato, un con todas mis fuerzas. No podía quedarme de brazos cruzados mientras la dignidad de tantas personas se veía arrastrada por el lodo. Sentí el llamado a la acción, a la entrega incondicional, a ser manos que sostienen y alivian porque en Cáritas, sabemos que el amor se mancha las manos.

Miembro del grupo de voluntariado joven, José Carlos señala que el trabajo fue incansable. Nos entregamos al cien por cien a la causa, a esa misión de consolar, de reconstruir esperanza. Organizamos eventos, buscamos recursos, y no paramos ni un solo instante. Y hoy, como pueden ver, seguimos aquí. Porque la solidaridad no tiene fecha de caducidad; seguimos acompañando, tendiendo la mano a las víctimas de la DANA, recordando que su dolor sigue siendo nuestro, apunta.

Para este joven, la experiencia vivida ha sido muy transformadora. “Esta tragedia nos ha recordado una verdad profunda: somos muchos en este mundo. Y no estamos aquí para enfrentarnos, para señalar diferencias o levantar muros. Estamos aquí para unirnos, para ser más fuertes en amor y fraternidad. Las catástrofes, las pruebas difíciles, no entienden de colectivos, pero siempre los más vulnerables son los más afectados. Nos desnudan, nos muestran que somos, vulnerables y, sobre todo, necesitamos ser en comunidad”, indicó.

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Días de entrega y solidaridad

Julia Burguillos, directora voluntaria de Cáritas en Letur (Albacete) también fue testigo directo de las graves consecuencias de las intensas lluvias que se llevaron la vida de seis personas en dicha localidad. “Desde el minuto cero Cáritas estuvo en primera

línea. Desde que empezó a llover, mi equipo y yo nos pusimos a disposición de lo que hiciera falta. Aquellos días, marcados por la tristeza y la impotencia, también fueron días de entrega. Cáritas actuó con rapidez, con cercanía y con organización, a disposición del dispositivo de emergencia, y atenta a las necesidades que pudieran surgir”, añadió.

La ola de solidaridad que despertó la tragedia sigue muy grabada en su corazón. “Es increíble cómo todo el mundo se volcó. Y gracias a ese apoyo Cáritas continúa prestando ayuda económica, psicológica y, sobre todo, humana. Aquí estamos y seguiremos estando para lo que haga falta”, subrayó Julia. “Entre todos, poco a poco, y día a día, conseguiremos que Letur vuelva a ser lo que era”, concluyó.

A Francisca Rey Santiago, directora voluntaria de Cáritas en la Iglesia de la Señora de la

Encarnación en Benamargosa (Málaga), la crecida del río supuso una dura prueba. El agua anegó huertos, viviendas y negocios. “Fuimos registrando los daños más importantes y valorando en qué les podíamos ayudar”. Así recuerda Paqui sus primeros pasos como voluntaria de Cáritas. “Nunca nos lo hubiéramos podido imaginar, pero estamos muy agradecidos por la ayuda que hemos recibido de parte de Cáritas Málaga para poder sostener a nuestros vecinos afectados”, añade.

El presidente de Cáritas Española, Manuel Bretón, cerró el acto con un mensaje de ánimo para todas las personas voluntarias. Todos ellos merecen un agradecimiento y un reconocimiento particular porque estuvieron y siguen estando en primera línea. Ninguno de los que estamos aquí nos hemos ganado nacer en la parte buena del mundo. Pero desde esta posición privilegiada tenemos un papel importante que hacer. ¡Gracias a los voluntarios!”

El presidente de Cáritas Española, pregonero de la Semana Santa de Barbastro

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