2 jul 2019
"Todo apóstol es un enamorado de Jesucristo"
S. Pedro nunca dudó de seguir al Señor, pero siempre lo quiso hacer a su manera; no acababa de reconocer que su vocación era un regalo del que le llamó
Tuvo que aprender a dejarse amar, a dejarse llevar por el amor. Sólo el diálogo final con Cristo sobre el amor necesario para la misión le tumbó definitivamente en su orgullo
"No rebajéis nunca la calidad espiritual y pastoral de cuanto hacéis"