9 feb 2023

Francia: los religiosos denuncian “la cultura eclesial, pastoral y teológica” que ha propiciado la cultura de los abusos

Una semana después de los dos informes que a lo largo de casi 2.000 páginas detallan la violencia sexual y psicológica infligida por los hermanos Philippe y su discípulo, Jean Vanier, durante décadas, a los miembros de las asociaciones espirituales por ellos fundadas, los religiosos franceses, a la vez que alaban la profesionalidad de estos trabajos y la valentía de las víctimas, lamentan “hasta qué punto al amparo de una doctrina -e incluso de la defensa de su rigor- pudieron cometerse tales crímenes”

“Cómo no cuestionar también de manera abismal la forma en que el secretismo ha permitido perpetuar el delirio gnóstico de estos hombres, su impunidad, sus posesiones y sus abusos sexuales”, señala el texto, firmado por la presidenta de la CORREF, Véronique Margron

1 feb 2023

Jean Vanier y los hermanos Philippe: la saga de los fundadores perturbados y abusadores

Pasó en vida casi por un santo, un hombre todo bondad, amigo de “los pequeños”, los discapacitados, creando una red de ayuda, acogida, un hogar para estas personas en el que también estaban implicadas las familias. Sin embargo, Jean Vanier, el fundador de El Arca, resultó ser un lobo con piel de cordero, “el discípulo más fanático” de otro fundador carismático, el dominico Thomas Philippe (1905-1993), al que demasiado tarde descubrieron en el Vaticano que se trataba, en realidad, de un personaje que “estaba gravemente perturbado mentalmente”

La investigación de Doctrina de la fe certificó que, “al menos desde 1942, Thomas Philippe había mantenido relaciones sexuales con mujeres a las que acompañaba espiritualmente, con justificaciones teológicas bajo un gran control espiritual. Estas mujeres, carmelitas, benedictinas, dominicas o laicas de L'Eau vive, tenían como principal rasgo común que todas estaban marcadas por un deseo muy fuerte de lo absoluto o en busca de una vocación

Con “una personalidad desestructurada e inmadura, propicia a fenómenos de control y dependencia", según señala el informe del Arca, en Doctrina de la Fe retratan a Jean Vanier como el "discípulo más fanático" y, cuando en 1956 Roma cierra L'Eau vive, Jean Vanier “vivió en varios lugares, solo, buscando siempre el contacto con su mentor”, hasta que fundó El Arca en 1964

La comisión identificó a 25 mujeres sometidas a Vanier. "Considerado a la vez como un profeta, un guía personal, un fundador clarividente, un hombre excepcional, pudo ejercer su autoridad en todas las esferas de la vida personal, espiritual y profesional de las personas, sin recurrir a la coacción"