Ojalá no se acostumbre el corazón

Ojalá no se acostumbre el corazón
Ojalá no se acostumbre el corazón

Últimamente, y no tan últimamente, parece que cuando abrimos un periódico o cualquier medio de comunicación, cualquier noticia supera a la anterior en dolor y consternación. Pero aunque no lo parezca, también pasan cosas buenas, sin embargo, no son noticia. ¿por qué? Quizá no tengan tanta audiencia y eso es lo que manda, pero las injusticias y el dolor cada vez se me clavan más en el corazón, es como una sensación de impotencia…

Decían que la covid nos iba a cambiar, íbamos a ser más personas, mas humanos y ¡ahora me rio yo de eso!... Es verdad que la solidaridad ha primado por encima de muchas cosas, pero es que España siempre ha dado ejemplo de ser un país solidario, aunque nunca es suficiente. No dejemos de impulsar ese valor que siempre nos ha caracterizado, de salir de nosotros mismos, de ser valientes y seguir luchando por tanta injusticia como nos rodea, ¡hagámoslo! Estoy segura de que aunque perdamos parte de nuestras seguridades, la recompensa merecerá la pena…

Bastante dolor tiene ya la vida, pongamos nuestro pequeño granito de arena para amortiguarlo, no nos acostumbremos a vivir con ese grito de auxilio de nuestros hermanos como si fuera algo normal, porque no lo es. Dejemos de poner excusas a lo que no las tiene y empecemos a comprometernos con este mundo que tanto nos necesita y le necesitamos. ¡No silenciemos tanta injusticia!

Sé que es difícil nadar contra corriente, nadie dijo que fuera fácil, pero os puedo asegurar que el esfuerzo merece la pena. Que no se acostumbre nuestro corazón…

Volver arriba