Informe de la Comisión de Nuevos Mártires-Testigos de la Fe, El Vaticano reconoce a más de 1.600 mártires, solo a lo largo del siglo XXI

Los mártires iluminan el camino
Los mártires iluminan el camino

La memoria de estos mártires será recordada en una vigilia, la "única celebración ecuménica en Roma durante todo el Año Jubilar", que tendrá lugar el próximo 14 de septiembre, en la festividad de la Exaltación de la Santa Cruz --y coincidiendo con el 70 cumpleaños del Papa León XIV-

De ellos, 304 mártires procedían de América, 153 eran europeos, asesinados en el Viejo Continente y en misión por todo el mundo, 277 fueron alcanzados en Oriente Medio y el Magreb, 357 en Asia y Oceanía, y 643 en África, la tierra "donde más cristianos mueren"

La Comisión de Nuevos Mártires-Testigos de la Fe, establecida en 2023 por el Papa Francisco, dentro del Dicasterio para las Causas de los Santos del Vaticano, ha reconocido a 1.624 nuevos mártires en el siglo XXI, es decir, desde el año 2000, según ha informado este lunes la Santa Sede, en una rueda de prensa.

De ellos, 304 mártires procedían de América, 153 eran europeos, asesinados en el Viejo Continente y en misión por todo el mundo, 277 fueron alcanzados en Oriente Medio y el Magreb, 357 en Asia y Oceanía, y 643 en África, la tierra "donde más cristianos mueren", según ha explicado el fundador de la Comunidad de Sant'Egidio y vicepresidente de la Comisión --compuesta por 11 miembros--, Andrea Riccardi.

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Las historias estudiadas fueron reportadas desde todas las latitudes, por diversas iglesias, diócesis, conferencias episcopales, institutos religiosos y otras entidades eclesiales, y dan testimonio de persecución religiosa, violencia de organizaciones criminales, explotación de recursos naturales, ataques terroristas y conflictos étnicos, entre otras causas, según ha informado el portal oficial del Vaticano 'Vatican News'.

"Desafortunadamente, los cristianos siguen muriendo --ha precisado Riccardi--, y siguen muriendo porque son testigos del Evangelio, porque son apasionados por Dios, por sus hermanos, porque son auténticos servidores de la humanidad, porque son comunicadores libres de la fe"

Según han explicado en la rueda de prensa, aún no se han recibido informes sobre los cristianos asesinados en julio en la parroquia católica de Gaza, ni sobre los dos niños asesinados en un tiroteo en una escuela católica de Minneapolis en agosto.

"Desafortunadamente, los cristianos siguen muriendo --ha precisado Riccardi--, y siguen muriendo porque son testigos del Evangelio, porque son apasionados por Dios, por sus hermanos, porque son auténticos servidores de la humanidad, porque son comunicadores libres de la fe".

La palma del martirio

Según ha añadido, "a menudo, la mera presencia de un cristiano como persona honesta, respetuosa de la ley y dedicada al bien común crea una molestia para quienes buscan llevar a cabo planes criminales".

Vigilia jubilar

La memoria de estos mártires será recordada en una vigilia, la "única celebración ecuménica en Roma durante todo el Año Jubilar", que tendrá lugar el próximo 14 de septiembre, en la festividad de la Exaltación de la Santa Cruz --y coincidiendo con el 70 cumpleaños del Papa León XIV--, según ha explicado el secretario del Dicasterio para las Causas de los Santos y presidente de la Comisión, el arzobispo Fabio Fabene.

Tal y como han explicado desde la Comisión, la investigación y el análisis que han llevado a cabo forman parte del organismo establecido por Juan Pablo II para el Jubileo del año 2000 para analizar y recopilar las historias de los testigos de la fe del siglo XX.

Estas historias se exhibieron posteriormente en el Memorial de los Nuevos Mártires del Siglo XX, en la Iglesia de San Bartolomé en la Isla Tiberina. El Papa Juan Pablo II también celebró una conmemoración ecuménica en memoria de estos mártires el 7 de mayo del año 2000 en el Coliseo.

Los miembros de la Comisión han destacado la importancia de estos testimonios de vida en el Año Santo dedicado a la esperanza. "Estos hermanos y hermanas --ha declarado el arzobispo Fabene-- pusieron el ancla de la esperanza no en la realidad del mundo, sino en el corazón de Dios. Esperaron en Dios, y su recompensa está llena de inmortalidad".

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