"Un hombre sabio, humilde y libre; entregado al servicio de modo total y generoso", afirma Arturo Sosa Fallece en Tokio Adolfo Nicolás, sj. el último general jesuita español

Adolfo Nicolás, con Arturo Sosa
Adolfo Nicolás, con Arturo Sosa Agencias

"Es una bendición haberlo conocido. A la vez que oramos por su felicidad eterna junto al Señor, a quien tan bien sirvió, pedimos poder continuar nosotros igualmente sirviendo a la misión como lo hizo él, con bondad, con generosidad y con alegría"

"Queridos hermanos: Con dolor, pero a la vez lleno de agradecimiento, quiero comunicarles que este 20 de mayo, en Tokio, el Señor ha llamado junto a Sí al P. Adolfo Nicolás, nuestro anterior SuperiorGeneral". De este modo anuncia el general de la Compañía de Jesús, Arturo Sosa, sj., el fallecimiento de su antecesor, el español Adolfo Nicolás, pocos días después de haber cumplido los 84 años, y tras una grave enfermedad.
En el comunicado, Sosa recuerda la vida de Nicolás, que fue elegido general el 19 de enero de 2008, hasta el 3 de octubre de 2016, momento en que presentó su renuncia. "El padre Nicolás estuvo lleno de calidez, bondad y alegría", apunta el general de la compañía. 

Universalidad y profundidad

"Como dice el P. Lombardi, nunca olvidaremos dos palabras que el P. Nicolás repetía constantemente y que nos impulsaban a la renovación de la Compañía: “universalidad” (la de nuestra vocación y nuestra misión) y “profundidad” (espiritual e intelectual, en aras de nuestra misión)", relata Sosa.

El Papa bendice a Adolfo Nicolás, sj. en Japón
El Papa bendice a Adolfo Nicolás, sj. en Japón

Tras recordar la oración que escuchó de boca del anterior general en unos ejercicios en 2011, el actual responsable de los jesuitas destaca al "Adolfo más real: un hombre sabio, humilde y libre; entregado al servicio de modo total y generoso; conmovido por los que sufren en el mundo, pero a la vez rebosante de la esperanza que le infundía su fe en el Señor Resucitado; excelente amigo, de los que aman la risa y hacen reír a otros; un hombre del Evangelio".
"Es una bendición haberlo conocido. A la vez que oramos por su felicidad eterna junto al Señor, a quien tan bien sirvió, pedimos poder continuar nosotros igualmente sirviendo a la misión como lo hizo él, con bondad, con generosidad y con alegría", concluye Sosa.

Comunicado de Arturo Sosa, sj. by Religión Digital on Scribd

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