Mmillones de mexicanos celebran a la Madre en el santuario El Nuncio de México pide a la Virgen de Guadalupe cambiar el corazón de los que abusan y se imponen por la fuerza
Millones de mexicanos se dieron cita en la Basílica de Guadalupe para cantarle las tradicionales mañanitas a la Virgen de Guadalupe, los primeros minutos de este 12 de diciembre al conmemorarse 494 años de su aparición en el cerro del Tepeyac a Juan Diego.
El nuncio apostólico en México, Joseph Spiteri, presidió por primera vez la celebración eucarística que se realiza a media noche, ahí pidió a los peregrinos orar para que la intercesión de Santa María de Guadalupe cambie el corazón de los que abusan de los más débiles y de los que se imponen por la fuerza.
Jimena Hernández corresponsal en México
Este 12 de diciembre se conmemoran 494 años de la aparición de la Virgen de Guadalupe a Juan Diego en el cerro del Tepeyac, por lo que millones de mexicanos se dieron cita para cantarle las mañanitas en la Basílica de Guadalupe.
Por primera vez, el Nuncio Apostólico en México, Joseph Spiteri celebró la tradicional misa que se realiza a media noche, ahí envío un saludo del Papa León XIV a todos los peregrinos y manifestó el deseo del pontifice de algún día visitar a la Virgen de Guadalupe en su Basílica.
Recordó que "Tonantzin", María de Guadalupe, quiso visitar México en un momento crucial de la historia de los pueblos originarios, enfrentados en un encuentro-desencuentro, lleno de luces y sombras, con los que llegaron desde el viejo continente.
"Ni los indígenas ni los españoles podían vislumbrar todavía el nacimiento de nuevas realidades. El mensaje de nuestra señora animaba hacia el respeto de la dignidad de todos los hijos e hijas de Dios y ella sigue diciéndonos que sólo con un verdadero espíritu de servicio. de atención a las necesidades de los demás, de amor fraterno, lograremos constituir algo nuevo a veces inédito, por el bien de todos"
El representante del Papa en México, aseguró que pese a todos los problemas que podemos tener, Guadalupe siempre repite "No temas, no estás tú bajo mi sombra y mi resguardo". Aseguró que son palabras que llenan nuestro corazón de esperanza, al saber que tenemos una madre que nos ampara porque es la madre del salvador.
Y que justo en este Año Jubilar de la Esperanza, debemos ser peregrinos y mensajeros de esperanza, como lo fue Juan Diego, que su nombre en nahuatl significa "mensajero de las cosas preciosas".
Mons. Spiteri, pidió a todos los peregrinos que oren para que bajo la interceción de María de Guadalupe, su hijo escuche los clamores de nuestro corazón, a veces triste, que busca serenidad y fortaleza; y escuche las peticiones del pueblo mexicano paz, de justicia, de conversión de los que abusan de sus hermanos y hermanas.
"Cambia oh madre nuestra, el corazón de los que se imponen con la fuerza sobre tus hijos y hijas más pequeños y desamparados, fortifica nuestro espíritu para no alejarnos nunca de tu hijo Jesucristo y de su amor misericordioso que ofrece un verdadero sentido a nuestra vida".
"Robustece o madre nuestras acciones, para que sepamos como tejer, relaciones fraternas con todos para servir a los más desamparados, para ser testigos de esperanza".
Finalmente, se alzaron oraciones para que la nación mexicana que hoy venera la solemnidad de María Virgen bajo la advocación de Guadalupe, alcance una paz verdadera y estable, alejando de sus ciudadanos, las injusticias y los egoísmos mutuos. Pero también pidiendo que cada uno de los peregrinos ser un claro testimonio de fe cristiana y colabor eficazmente en la prosperidad del pueblo mexicano.
Mons. Joseph Spiteri, agradeció la invitación del Cardenal Carlos Aguiar Retes para presidir la celebración eucarística en honor a Santa María de Guadalupe y también destacó a sus hermanos que cocelebraron con él, Mons. Héctor Mario Pérez, Secretario General de la Conferencia del Episcopado Mexicano, en representación de todos los obispos del país; Mons. Anthony C. Celino, Obispo Auxiliar del Paso Texas y todo el cabildo de la Insignie y Nacional Basílica de Santa María de Guadalupe.