Presidente de México avala que obispos mexicanos se reúnan con líderes del crimen organizado

La violencia no cede en distintos territorios del país, por lo que obispos de Guerrero, José de Jesús González Hernández, obispo de la Diócesis Chilpancingo-Chilapa; Mons. Dagoberto Sosa Arriaga de Tlapa; Mons. Joel Ocampo Gorostieta de Ciudad Altamirano; y Mons. Leopoldo González de Acapulco, se han reunido por separado con líderes del crimen organizado para frenar la violencia que se vive en el Estado y aunque afirmaron que lograron un acuerdo para detener los ataques en Chilpancingo y respetar las rutas de transporte público; no lograron una tregua para todo el Estado.

Mons. José de Jesús González Hernández, obispo de la Diócesis Chilpancingo-Chilapa; señaló que los delincuentes ambicionan el dinero, ambicionan el poder, ambicionan territorios, ambicionan los cobros, ambicionan un afán de dinero, una fan de poder, por eso no se pudo lograr los acuerdos para una tregua de paz.

"Los territorios no los sueltan, les ha costado vidas, les ha costado trabajo, le ha costado dizque ganárselos y no los sueltan".

"Vamos a seguir insistiendo con ellos para que se pacte una tregua y la paz en Guerrero en donde en estos momentos ciudades como Taxco, Chilpancingo y Acapulco están incendiadas por la violencia", comentó.

Por su parte Mons. Salvador Rangel, Obispo Emérito de esta zona del país, afirmó que el Gobierno o no tiene voluntad de apagar esos fuegos o le tiene miedo al crimen organizado o también hay ciertos arreglos con ellos, ya que las autoridades ha sido ineficaces para tratar de arreglar esos asuntos. En entrevista comentó que lamentablemente él se encuentra amenazado de muerte.

"Incluso estoy amenazado, y le voy a decir, hasta sentenciado a muerte, yo no sé si por el gobierno, o si o estos capos, pero yo sigo en la línea".

Presidente de México avala reuniones de obispos con líderes criminales

Al ser cuestionado sobre este tema, en su conferencia mañanera, el presidente Andrés Manuel López Obrador aplaudió estos encuentros, aunque destacó que corresponde al Estado garantizar la paz y tranquilidad en Guerrero, comentó que ve muy bien que sacerdotes, pastores, integrantes de todas las iglesias participen, ayuden en la pacificación del país

“Lo vemos muy bien, nada más que nada de acuerdos que signifiquen conceder impunidad, privilegios, licencias para robar. Pero el que quiere abandonar ese infierno porque también eso se tiene que tener muy claro, como dice la canción, ‘la jaula aunque sea de oro no deja de ser prisión’”.