Abogan por un Pacto de Migración y Asilo, que facilite los corredores humanitarios Los obispos europeos exigen a los gobiernos de la UE "libertad de culto" en tiempos de pandemia

"Dejadnos rezar": católicos franceses se manifiestan contra el cierre de iglesias por la pandemia
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En su mensaje, que lleva por título 'Recuperar la esperanza y la solidaridad', los prelados dirigen "un mensaje de esperanza y un llamamiento a la solidaridad a las instituciones europeas y a los Estados miembros en esta crisis que nos ha sobrecogido"

"Tenemos la esperanza de que Dios puede convertir todo lo que sucede en algo bueno, incluso aquellas cosas que no comprendemos y que parecerían malas"

"A muchos nos preocupaba que la propia Unión Europea, como proyecto económico, político, social y cultural, estuviera en peligro. Nos percatamos entonces, como dijo el Papa Francisco, que estamos en el mismo barco y que sólo podemos salvarnos a nosotros mismos si permanecemos juntos"

Exigen "que la vacuna COVID-19, cuando esté disponible, debe ser accesible a todos, especialmente a los pobres", así como "el incremento de la ayuda humanitaria y la cooperación para el desarrollo, y la reorientación de los gastos militares hacia los servicios sanitarios y sociales"

"A menudo se ha dicho que el mundo será diferente después de esta crisis. Pero depende de nosotros que sea mejor o peor, si salimos de esta crisis fortalecidos en la solidaridad o no"

Los presidentes de las conferencias episcopales de la Unión Europa, han pedido a los líderes de los estados miembros que se garantice la "libertad de culto" en estos tiempos de coronavirus. Frente a la realidad que se vive en algunos países, donde se ha ordenado el cierre de templos (Francia ha anunciado que la medida se prolongará, al menos, hasta el 1 de diciembre), los episcopados europeos ven "crucial" el "respeto de la libertad de religión de los creyentes, en particular la libertad de reunirse para ejercer su libertad de culto, respetando plenamente los requisitos sanitarios".

"Declaramos nuestra buena voluntad de mantener el diálogo entre los Estados y las autoridades eclesiásticas para encontrar la mejor manera de conciliar el respeto de las medidas necesarias y la libertad de religión y de culto", sostiene la nota, firmada por los responsables católicos de los 27 países de la UE. En su mensaje, que lleva por título 'Recuperar la esperanza y la solidaridad', los prelados dirigen "un mensaje de esperanza y un llamamiento a la solidaridad a las instituciones europeas y a los Estados miembros en esta crisis que nos ha sobrecogido".

Padre Ángel, David Sassoli y el cardenal Osoro
Padre Ángel, David Sassoli y el cardenal Osoro

En el mismo, reafirman "nuestro compromiso con la construcción de una Europa que ha traído la paz y la prosperidad a nuestro continente, y con sus valores fundacionales de solidaridad, libertad, inviolabilidad de la dignidad humana, democracia, Estado de derecho, igualdad y defensa y promoción de los derechos humanos".

No al cierre de las fronteras

"Tenemos la esperanza de que Dios puede convertir todo lo que sucede en algo bueno, incluso aquellas cosas que no comprendemos y que parecerían malas", afirma el comunicado, en el que los responsables religiosos "nos comprometemos a construir una fraternidad universal que no deje a nadie fuera".

"La pandemia que nos ha azotado en estos últimos meses ha sacudido muchas de nuestras seguridades anteriores y ha revelado nuestra vulnerabilidad y nuestra interconexión", señala el escrito, que pone énfasis en el sufrimiento de ancianos y pobres, y la reacción de "miedo, cerrando las fronteras nacionales y exteriores, algunos incluso negándose a compartir entre sí los muy necesarios suministros médicos" llevada a cabo por algunos gobiernos.

"A muchos nos preocupaba que la propia Unión Europea, como proyecto económico, político, social y cultural, estuviera en peligro. Nos percatamos entonces, como dijo el Papa Francisco, que estamos en el mismo barco y que sólo podemos salvarnos a nosotros mismos si permanecemos juntos", señala el escrito, que reconoce cómo la UE "comenzó a responder de forma conjunta a esta dramática situación".

Consejo de la UE
Consejo de la UE

No obstante, los obispos subrayan que "el futuro de la Unión Europea no depende únicamente de la economía y las finanzas, sino también del desarrollo de un espíritu común y una nueva mentalidad", un "cambio radical para mejorar" basado en el principio irrenunciable de la solidaridad y el no dejar a nadie atrás. 

Vacuna para todos

"En este contexto, cabe mencionar que la vacuna COVID-19, cuando esté disponible, debe ser accesible a todos, especialmente a los pobres", reclaman los episcopados europeos, que piden "el incremento de la ayuda humanitaria y la cooperación para el desarrollo, y la reorientación de los gastos militares hacia los servicios sanitarios y sociales".

Así, los obispos reclaman un "pacto sobre la Migración y el Asilo", que respete "ciertos principios, valores y obligaciones jurídicas internacionales", independientemente de las condiciones de las personas involucradas, principios de actuación y valores que son la base de la identidad de Europa y tienen su origen en sus raíces cristianas".

Iglesia vacía
Iglesia vacía

"También recomendamos que se faciliten vías seguras y legales para los migrantes, y corredores humanitarios para los refugiados, mediante los cuales puedan venir a Europa con seguridad y ser acogidos, protegidos, promovidos e integrados", sostiene la nota, que añade que "Europa no puede ni debe dar la espalda a las personas que proceden de zonas de guerra o de lugares donde son discriminadas o no pueden gozar de una vida digna".

Mejores o peores, nuestra elección

"A menudo se ha dicho que el mundo será diferente después de esta crisis. Pero depende de nosotros que sea mejor o peor, si salimos de esta crisis fortalecidos en la solidaridad o no. Durante estos meses de pandemia, hemos sido testigos de muchos signos que nos han despertado la esperanza, desde el trabajo del personal sanitario y el de quienes cuidan de los ancianos, hasta los gestos de compasión y creatividad de las parroquias y comunidades eclesiales", recalcan los obispos europeos, que aseguran a las instituciones de la UE que "la Iglesia permanece a su lado en el esfuerzo común de construir un futuro mejor para nuestro continente y el mundo. Todas las iniciativas que promuevan los auténticos valores de Europa serán apoyadas por nosotros. Confiamos en que de esta crisis podamos salir más fuertes, más sabios, más unidos y más solidarios, cuidando más del hogar común y siendo un continente que impulse al mundo entero hacia una mayor fraternidad, justicia, paz e igualdad".

Fieles católicos protestan por la prohibición de misas
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