19 may 2020
La Iglesia asturiana inmatriculó de manera sistemática más de 550 propiedades
Incluye templos, cementerios, capillas vecinales, campos de frutales, fincas urbanas y solares
La Iglesia asturiana aprovechó la rendija de la Ley Hipotecaria de 1946 y la posterior reforma del Gobierno Aznar para inmatricular a su nombre incluso bienes protegidos por la Unesco
Cuentan con notas simples para demostrar, por ejemplo, que la Iglesia puso a su nombre San Julián de los Prados o San Miguel de Lillo, otros dos bienes del prerrománico asturiano que gozan de protección internacional. La investigación sigue en marcha