Justin Welby, el ya exarzobispo de Canterbury y cabeza visible de los anglicanos en el mundo desde 2013, dejó oficialmente su cargo como primado de la Iglesia de Inglaterra este lunes 6 de enero
Lo hace casi dos meses después de anunciar su renuncia por no haber actuado cuando en 2013 conoció un grave caso de abusos infantiles en el seno de esta comunión
El arzobispo de York, Stephen Cottrell, también señalado por su gestión en torno a un caso de abuso sexual de un religioso, ocupará provisionalmente el cargo y asumirá la mayoría de las funciones juntoa a la obispa de Londres, Sarah Mullally y la obispa de Dover, Rose Hudson-Wilkin, que asumirá las actividades diocesanas
La elección del nuevo primado de la Iglesia de Inglaterra se demorará al menos hasta otoño, y la desarrollará la Comisión de Nombramientos de la Corona (CNC), un órgano compuesto por 17 religiosos