Ucrania, que ya desconfiaba del Papa -los propios obispos ucranianos, reunidos la pasada semana en el Vaticano, admitían que la popularidad de Francisco había llegado a mínimos históricos-, mientras Zelenski recordaba que, para Kiev, no hay nada que negociar con Rusia mientras no se retirara de su territorio
Matteo Zuppi, delegado papal para la guerra de Ucrania, regresa de Pekín tras haberse encontrado con las autoridades chinas, en un encuentro inédito hasta la fecha (la Santa Sede y China no tienen relaciones diplomáticas)
"No hay papel mediador para el Papa, es prorruso, no es creíble", destacaba en la televisión ucraniana Podolyak, quien acusó al Papa Francisco de "prorruso" y negaba cualquier papel mediador del Vaticano para el fin del conflicto. "El Vaticano no puede tener ninguna misión de mediación, porque sería una función que engañaría a Ucrania o a la justicia"