La Conferencia Episcopal Católica de Haití, en un mensaje recibido por ACN, llama al gobierno a actuar y hace un llamamiento a todos los haitianos a trabajar por la paz y superar el odio
La capital, Puerto Príncipe, está aislada, las escuelas están cerradas, las actividades se han paralizado. Incluso el aeropuerto internacional Toussaint Louverture está cerrado
"Todo el mundo está alerta. Nos sentimos amenazados", explica a la fundación pontificia Ayuda a la Iglesia Necesitada (ACN) Monseñor Max Leroys Mésidor, presidente de la Conferencia Episcopal
"Hacemos un llamamiento a quienes tienen a su cargo el gobierno de la ciudad para que actúen con determinación para restablecer la seguridad y garantizar la protección de los ciudadanos"
Las bandas armadas, que siembran el terror con su violencia cotidiana, libran una feroz lucha por controlar el territorio e imponer su dominio. Hasta la fecha, se estima que casi 700.000 personas han sido desplazadas dentro del país