Sumar, Podemos, ERC, BNG y Junts han firmado y registrado este martes en el Congreso una proposición de ley orgánica, a propuesta de la Asociación No es Terapia, para castigar con penas de uno a cuatro años de cárcel a quienes practiquen "terapias de conversión" para personas LGTBIQ+, una práctica que han calificado de "tortura" y de "laboratorios del horror"
En el registro de esta iniciativa también ha participado Javi, que ha relatado cómo estuvo sometido a estas prácticas durante cuatro años y medio. "Me internaron durante seis meses en un convento solo por estar enamorado de un chico a mis 20 años. Urge criminalizar este tipo de prácticas, porque los responsables son un peligro social para la gente del colectivo LGTBIQ+", ha declarado
"En las torturas no hay acompañamiento, no hay conversión, no hay libertad, lo que sí que hay es maltrato, abusos, vejaciones, manipulación y coacciones", ha denunciado, al tiempo que ha animado a permanecer unidos y gritar con una sola voz: "No somos enfermos, no somos pecadores, no somos ni vagos ni maleantes, no buscamos romper familias", ha subrayado