13 feb 2021
La necesidad del encuentro con la gente
Lo que de verdad me salva es el contacto directo y sencillo con las personas. Una reunión, la Eucaristía, una conversación, o simplemente salir a la calle y saludar, entrar en una casa, preguntar “¿cómo estás?”, compartir unas risas. Cosas simples que me hacen sentirme uno más, parte de un pueblo, un ser humano y no un personaje o una función.