"Sobre Dina Boluarte pende la triple espada de Damocles: ser mujer, de origen serrano y elegida por Perú Libre, el partido de Castillo. La clase política peruana actual -mayoría costeña, de derecha y ultraderecha- difícilmente respetará la tregua que ha pedido"

"También la Iglesia está muy polarizada y, aunque el comunicado de los Obispos tras el autogolpe pareciera apostar decididamente por esa 'unidad nacional' a la que apeló la presidenta, un gran sector de laicos y sobre todo clérigos simplemente celebraron la caída de Castillo y se plegaron al rechazo a todo lo que huela a centro izquierda y menos izquierda"

"Tenía claro que o teníamos golpe cívico-militar en toda regla o se iniciaría un reguero de sangre… (¡a comprar papel higiénico!). Pues no hubo ni lo uno ni lo otro"

"Pedro Castillo iba metiendo la pata cada rato y muchos no acabábamos de tener claro si era tonto o vivato. Su última acción claramente demostró que de listo tenía muy poco. Queda por saberse si, de verdad, él o quienes estaban detrás, eran, en verdad, vivatos"

"No le dejaban gobernar a P. Castillo y dudamos, dejen gobernar a Dina E. Boluarte Zegarra, nacida en Apurimac -sierra- y primera mujer presidenta en el Perú"

Así se manifestaron la Conferencia de Religiosas y Religiosas del Perú, y el Instituto Bartolomé de Las Casas. Apoyó la perspectiva de los pobres, la Confederación de Religiosas y Religiosos de América Latina y el Caribe, que se pronunció desde su sede en Bogotá (Colombia).

En general, los agentes de pastoral, religiosas, religiosos, laicas y laicos, teólogos y pastoralistas, buscan reafirmar la democracia pero también son conscientes de que aún dista mucho el ejercicio de la "mejor política" como enseña el Papa Francisco en su encíclica Fratelli tuti.

Entre tanto, a última hora del día del golpe fallido (miércoles 7), la Presidenta Dina Boluarte lo primero que hizo fue recibir al arzobispo de Lima, Carlos Castillo, con quien conversó por 12 minutos sobre la relidad del país, y el modo de enfrentar la actual situación.

El Consejo Permanente de la Conferencia Episcopal peruana rechazó de manera enérgica y absoluta la ruptura del orden constitucional, advirtiendo que "es un derecho y un deber moral de los pueblos y de los ciudadanos la defensa de la democracia".

El pronunciamiento obedece a la determinación de carácter inconstitucional e ilegal tomada por el presidente Pedro Castillo, según la cual disuelve el Congreso de la República e instaura un gobierno de emergencia excepcional, además de declarar el Estado de Excepción

Los prelados llamaron a la unidad nacional, para que se mantenga la tranquilidad y se evite cualquier forma de violencia que afecte directa o indirectamente los derechos fundamentales de los ciudadanos.

El Cardenal Pedro Barreto fue duramente criticado por la elite política y hasta por sectores eclesiásticos, hace un mes, por pedir al entonces Presidente Pedro Castillo que dejara el cargo por el bien común.

Hoy, pide mirar adelante, buscando lo que une a peruanos y peruanas para resolver la grave crisis institucional. "Esta es la hora", indicó.

Que Pedro Castillo diera un paso al costado "lo pensaba yo en conciencia y ahora queda en la historia como una profesía", declaró a Religión Digital.

Dura declaración del Consejo Permanente de la Conferencia Episcopal del Perú.

"Solicita a las instituciones tutelares de la patria asumir con plenitud sus funciones constitucionales para proteger y salvaguardar la democracia, preservado y reestableciendo el orden público y constitucional, haciendo efectivas las responsabilidades de la ley".

Primera declaración episcopal en Lima ante la ruptura del sistema constitucional.

Mons. Carlos Castillo rechaza estos hechos y lamentó interrupción del orden constitucional democrático. Llamó al diálogo a todos los políticos.

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