El Prefecto de la Secretaría para la Economía, en una entrevista con los medios de comunicación del Vaticano, examina el balance de 2021: 3 millones de euros de déficit frente a los 33 millones previstos. El tiempo de los sacrificios no ha terminado. A pesar de los resultados positivos, la Santa Sede se descapitaliza
Guerrero califica como un problema eclesial la insuficiente financiación de la misión del Papa y ve con satisfacción la venta del palacio de Londres “de modo transparente”
"Los ingresos han pasado de 248 millones de euros a 1.093 millones de euros; los costes de 315 millones de euros a 1.096 millones de euros; el déficit total ha resultado ser de 3 millones de euros"
"Si comparamos la cuenta económica de la Curia – el antiguo perímetro – con el presupuesto, con un déficit de 49,6 millones de euros encontramos un superávit de 28,8 millones (78,4 millones de euros mejor de lo esperado"
"La Curia, que es la que permite una mejor comparación con los años anteriores – el antiguo perímetro del balance consolidado – sigue mostrando una financiación insuficiente, que yo definiría como un problema eclesial. La misión del Papa no está suficientemente financiada"
"El hecho es que la Santa Sede reduce su patrimonio cada año para cubrir los servicios curiales (...). La Santa Sede se despatrimonializa cada año un promedio de 20-25 millones de euros"
"No podemos decir que el tiempo de los sacrificios se haya acabado, el 2022 será un año particularmente difícil y también el 2023. Ahora tenemos que encarar el presupuesto del 2023 que no nos permite estar muy alegres, a pesar de que la presión del COVID haya disminuido"