Casaldáliga, bien y aislado en São Félix a sus 94 años
El obispo de los pobres y poeta, ejemplo de aceptación ante las limitaciones
A pesar de su estado de salud, debilitado por el Parkinson, a sus 94 años el obispo emérito sigue en São Félix
La enfermedad limitó sus movimientos y habla hace tiempo
Pedro Casaldáliga se enfrentó a la dictadura militar y al latifundio, en defensa de los explotados de la Amazonía brasileña
Como ha informado recientemente la Prelatura de São Félix do Araguaia a las agencias de noticias, el obispo emérito de São Félix do Araguaia, Pedro Casaldáliga, está bien de salud y aislado, en el contexto de la pandemia del coronavirus.
A pesar de su estado físico, debilitado por el Parkinson, a sus 94 años Casaldáliga sigue en la ciudad. En medio de las restricciones de movimientos, el obispo, cuya enfermedad limitó sus movimientos y habla hace tiempo, sirve de ejemplo para asumir las limitaciones con valentía, aceptación y entrega a los demás cuidando, en este caso, las distancias.
Casaldáliga llegó a la región a una edad temprana, como sacerdote misionero. Se enfrentó a la dictadura militar y al latifundio, publicó libros y poemas y fue nombrado obispo. Su historia (nació en España pero eligió São Félix do Araguaia como su hogar), ha sido contada en libros, series de televisión y películas. Don Pedro vive en una casa sencilla en São Félix, que es mantenida por la prelatura, al cuidado de enfermeros especializados. Sus versos reivindican la dignidad de los pobres de la Amazonía brasileña, "sobrevivientes en la despiadada selección natural".