CEAMA invita a vivir la Navidad como un camino de esperanza junto a los pueblos amazónicos
(ADN Celam).- Con motivo de la celebración de la Navidad, la Conferencia Eclesial de la Amazonía (Ceama) compartió un mensaje de felicitación en el que eleva una acción de gracias por el camino recorrido junto a los pueblos amazónicos y por la vida que sigue brotando en los territorios, incluso en contextos marcados por dificultades.
En su saludo navideño, la Ceama resalta de manera especial a las comunidades que “resisten, sueñan y construyen esperanza”, y remarca que la Navidad es un tiempo para reconocer la presencia de Dios que acompaña los procesos de los pueblos y renueva la vida en medio de los desafíos sociales, ambientales y eclesiales.
El mensaje recuerda que el nacimiento de Jesús invita a renovar el compromiso con una Iglesia “que escucha, acompaña y reconcilia”, encarnada en la realidad amazónica y atenta tanto “al clamor de la tierra como al clamor de los pueblos”.
Dios camina con su pueblo
La Ceama expresa que, en medio de las múltiples crisis que atraviesa la región y el mundo, la Navidad recuerda una verdad central de la fe cristiana: “Dios camina con su pueblo y hace nuevas todas las cosas”. Por ello, este tiempo de gracia es entendido como una invitación a fortalecer la misión compartida, a profundizar la sinodalidad y a seguir tejiendo redes de cuidado, justicia y vida plena para la Amazonía.
Con una mirada puesta en el futuro, la Presidencia y la Secretaría Ejecutiva de la Ceama manifiestan su deseo de que el año 2026 esté marcado por la esperanza, renovando el compromiso eclesial con los pueblos amazónicos y con la defensa de la Casa Común.
La Navidad como amor en acción
También, el cardenal Pedro Barreto, presidente de la Ceama, en una intervención difundida a través de la Red de Comunicación Regional (RCR) recordó que la Navidad es el gran acontecimiento de la fe cristiana, centrado en el nacimiento de Jesús.
“El nacimiento de un niño nos da la alegría de experimentar el amor de Dios”, dijo el cardenal, subrayando que la Navidad es “amor puesto en acción”, porque Dios ama y actúa enviando a su Hijo Jesucristo para manifestar ese amor a toda la humanidad. Explicó que se trata de un Dios cercano, que revela su ternura y su grandeza en la fragilidad de un niño pobre que nace fuera de la ciudad.
El Card. Barreto recordó que Jesús mismo enseñó que “no hay amor más grande que dar la vida por los amigos”, y dijo que la celebración navideña invita a dejar que este encuentro con Cristo transforme la vida cotidiana, marcada muchas veces por prisas, conflictos, inseguridades y desencuentros.
El presidente de la Ceama insistió en la urgencia de “abrir el corazón de par en par” a Jesús que nace para todos, como fuente de alegría y esperanza, y llamó a vivir un amor que se expresa en el servicio. Recordó las palabras de Jesús: “No he venido para que me sirvan, sino para servir”, afirmando que este es el mejor regalo que se puede ofrecer a Dios, a la familia, a la Iglesia y a la sociedad.