El pasado 25 de agosto, el papa Francisco intervino por videoconferencia ante unos 400 jóvenes congregados en la basílica de Santa Catalina, en San Petersburgo, en la Jornada de la Juventud Rusa, que se estaba celebrando esos días, y a quienes invitó a ser "sembradores de semillas de reconciliación, pequeñas semillas que en este invierno de guerra no brotarán de momento en la tierra helada, sino que florecerán en una futura primavera"
Al finalizar la lectura de su discurso, preparado en español, según las agencias de prensa improvisó en italiano unas palabras a modo de despedida: "No olviden nunca su herencia. Ustedes son herederos de la gran Rusia, la gran Rusia de los santos, de los reyes, la gran Rusia de Pedro el Grande, de Catalina II, el gran imperio ruso, culto, tanta cultura, tanta humanidad. Ustedes son los herederos de la gran madre Rusia. Sigan adelante. Y gracias, gracias por vuestro modo de ser rusos"
Esas palabras provocaron una nueva tormenta diplomática en donde Ucrania ha acusado al Papa de hacer “propaganda imperialista” a favor de Rusia, el país que la invadió el 24 de febrero de 2022 y con el que sigue en guerra