«¡Oh Dios mío: cuántos apóstoles para hablar de Cristo, tal vez bastante pocos para vivir a Cristo… Mostrar a Cristo ante el islam y mostrar su ternura!» (A. Peyriguère)
"Nazaret no es un camino fácil. La asimilación a un ambiente, el ocultamiento silencioso, la renuncia a las eficacias visibles, constituyen día a día un duro sacrificio para el apóstol" (M. Lafont)
"Vivir el misterio eucarístico para extender el cristianismo, para difundir la Iglesia, he aquí la inspiración fundamental del padre de Foucauld" (A. Peyriguère)
Una vida única animando a una multitud sin profanar la interioridad de nadie
El Espíritu logra que todos seamos uno y que la unidad sea multitud
Vivir la comunión de los santos implica vivir y comportarse como un miembro consciente de un todo orgánico, pensando y queriendo en el espíritu y corazón de todos
Para Simone Weil la atención, en su más alto grado, es lo mismo que la oración
Para no caer en esta idolatría, es importante vaciar el deseo de todo contenido, con el fin de dirigir la plenitud de la atención a nuestro deseo puro, vacío, pues hay presencia real de Dios en todo lo que no está cubierto con la imaginación. Para lograr vaciar el deseo necesitamos tener nuestro propio espacio de silencio y soledad
Continuador de la presencia de Carlos de Foucauld en Tamanrasset, con los tuareg del desierto del Sahara (Argelia)
"El autor quiere contagiarnos la sed de Absoluto de Carlos de Foucauld. Para ello no duda en desmenuzar con rigor científico los cambios y múltiples contradicciones de su vida"
"El autor nos transmite el mensaje central de una vida: la espiritualidad de nazaret se puede vivir en todas las situaciones"
Cuando veo que no saben nada de las cosas necesarias y divinas, que tampoco instruyen en ellas a los otros ni les guían a la luz del conocimiento, ¿no está produciéndose la misma situación que denunció Cristo respecto de los fariseos y de los doctores de la ley?
«Desgraciados de vosotros, doctores de la ley, porque vosotros habéis quitado la llave del conocimiento; no habéis entrado vosotros y habéis impedido que entren quienes lo deseen» (Lc 11, 52)
Estar vivo pero tener que morir no es la constatación apática de un hecho normal y natural, sino que despierta una tensión entre la experiencia de estar vivos y el tener que morir como un destino que nos asusta y produce en nosotros rechazo.
Morir equivale a no-ser, a dejar de ser, y la libertad -en cuanto dimensión propia de la existencia humana- consiste en estar abierto infinitamente y sin límites en el ser.
La Inteligencia Espiritual tiene que contar con la muerte para lograr el sentido de la vida.
"Una fraternidad abierta, que permita reconocer, valorar y amar a cada persona más allá de la cercanía física, más allá del lugar del universo donde haya nacido o donde habite" (Papa Francisco)
"Recordar el ejemplo del P. Carlos de Foucauld, a quien se juzgó digno de ser llamado, por su caridad, el Hermano universal" (Pablo VI)
"Es observando al Cristo en la cruz, especialmente aquél que el mismo pinta sobre el tabernáculo de su capilla. Y también en la celebración del sacrificio de la misa y la comunión con el misterio pascual, que poco a poco pudo abrir su corazón a las dimensiones del corazón de Cristo"
Si se destierra definitivamente del conocimiento al amor, el otro se convierte en un extraño, en una cosa
El amor requiere diferenciación sin separación; es un ir hacia el otro que rebota en un auténtico entrar en sí, mediante la aceptación del otro dentro del propio sí.
La ventaja de este pensamiento lineal es que es riguroso y eficaz. El problema está en despreciar los caminos hacia la verdad, más profundos e intuitivos que están situados en el hemisferio derecho del cerebro, y que siempre guiaron a la humanidad.
Si independizamos los hemisferios, por un lado caemos en el control frío y por el otro en el emotivismo blando. Los dos lóbulos son necesarios para abordar la realidad.
Por encima de todo esto está encontrar el sentido de nuestra vida, ya que el ser humano no tolera el vacío existencial.
Cuando surge la esperanza, cuando surge la razón por la que vivir, crece también el sentimiento de solidaridad y compasión.
Jesús comenzó un proceso de desacralización desplazando el centro de gravedad del templo, el culto y el sacerdocio en favor de una vida entregada a los demás, especialmente a los más vulnerables
El cristianismo se constituyó como una comunidad de personas, que vivían la salvación como un proyecto de sentido en el mundo y que estaban lejanos a las dinámicas ascéticas y cultuales de Israel y otros grupos religiosos del imperio romano
El ministerio (diáconos, presbíteros y entre ellos el obispo) no era solo una dignidad sino una carga, ya que los dirigentes eran los primeros perseguidos por las autoridades. Vivían en el seno de las comunidades que les habían elegido y como ciudadanos del imperio, casados y con familias, con un trabajo profano y un estilo de vida laical
Hay que recuperar la alternativa cristiana a la religión y a la sociedad, pero esto implica una reforma radical de la Iglesia y del cristianismo, recuperando el Vaticano II y yendo más allá de él. Quizás la crisis actual de la Iglesia sea la base para una nueva etapa evangélicamente innovadora
La Comunidad Ecuménica Horeb Carlos de Foucauld presenta como novedad el libro Etty Hillesum, una mística en el horror nazi, de la editorial Digital Reasons
El profesor y escritor José Luis Vázquez Borau muestra la evolución de esta joven judía holandesa que, desentendida del hecho religioso, va profundizando en su interior hasta el encuentro con Dios, convirtiéndose en su manifestación caritativa en medio del horror nazi, de un modo particular en Auschwitz donde murió ella y su familia.
La Comunidad Ecumènica Horeb Carlos de Foucauld tiene el gozo de invitaros a les VIII Jornadas de desierto entorno al tema de la Eucaristía en relación a la vivencia del hermano Carlos de Foucauld.
La vida surgió hace 3.800 millones años y hace unos cuatro millones de años, la inteligencia, lo que muestra que el Universo no es un absurdo
El Espíritu dirige nuestro universo hacia el punto Omega de Teilhard de Chardin, pero no con un determinismo ciego, sino incorporando el principio de indeterminación de Heisenberg y nuestra participación en este proyecto futuro
Cuando la imaginación simbólica se concibe como el único y verdadero instrumento de conocimiento y se antepone el símbolo al ser, a la existencia, a la historia, encerrándose en la experiencia interior sin abrirse a la trascendencia, nos encontramos con el narcisismo espiritual
El racionalismo nos dificulta acercarnos a la mística y puede llevarnos al gnosticismo