Sobre los abusos: "Es bueno que no nos creamos todos tan limpios. Tenemos que pedir perdón. No se puede esconder ni tapar, nunca. Hay que destapar, descubrir, curar, y hay que abrir y, si es necesario, eliminar, todo lo que no tenga que ver con el Evangelio"
El futuro de los benedictinos: "Aquello no puede ser otra cosa que un monasterio, un lugar de acogida de todos, sin distinción. Que tiene una historia, es cierto. Se ha cambiado la ley, se han hecho las cosas que se tenían que hacer (...). Pero sospecho que (el Gobierno) preguntarán antes. Y por supuesto, yo como arzobispo, defenderé a la comunidad siempre"
Aborto: "Yo defiendo la vida desde el inicio hasta el final. Nadie es dueño de la vida, solo Dios, y esto es desde el inicio hasta el final. Es normal que defendamos esto. Me parece que entrar en la dinámica de que un ser humano o un grupo, o unos votos, son los que decidan sobre la vida es entrar en una dinámica que lleva a la sociedad al absurdo"
"Parece que tenemos que vivir cosas extraordinarias, cuando en lo ordinario es donde vivió San Isidro. Un hombre que oraba, que trabajaba, que ayudaba, que tenía caridad, que no olvidaba a los demás, que construía una familia cristiana"
"Madrid es mucho más, es una ciudad de mujeres y hombres abiertos, de corazones grandes. Olvidar esto sería olvidar otro Madrid que no tiene nada que ver con su esencia"
"Debemos hacer esfuerzos por hacer una nueva evangelización, que ha de ser nueva en ardor, en método y expresión, y esto nos tiene que llevar a todos, empezando por mí, a hacer esta novedad y a llevarla a cabo. Lo que no vale es decir ‘Siempre se hizo así’, esto no vale"
Ataques al Papa: "Bueno... ¿por qué atacaban a Jesucristo, si solo hacía el bien? El Papa está pasando haciendo el bien. A veces la gente busca que le den la razón, y el Papa ni el obispo ni nadie están para dar la razón. Están para anunciar a Jesucristo y acercar a Jesucristo"