27 ago 2025
A pesar de la tregua entre Tailandia y Camboya, los civiles desplazados no pueden regresar a sus hogares
Aunque no hay enfrentamientos armados, la tensión sigue siendo alta. En algunas zonas, el ejército tailandés ha instalado nuevas vallas y empalizadas, ocupando terrenos y ampliando la frontera
El jesuita Enrique Figaredo, prefecto apostólico de Battambang, provincia camboyana limítrofe con Tailandia, describe la situación: "El acuerdo de tregua sigue siendo muy frágil"
El prefecto acaba de pasar cuatro días en los campos de refugiados de la frontera: "en medio de la precariedad veo una gran solidaridad, gracias al apoyo del Gobierno, de las ONG y de Cáritas. Los desplazados son acogidos en recintos de monasterios budistas, en los jardines de los templos"
Entre los desplazados hay también católicos "a los que he animado a mantener una actitud interior de no violencia, a respetar el lugar en el que se encuentran y a ocuparse de la educación de los niños"