50 años del Mes de la Biblia en Brasil Presidente de los obispos brasileños: "Ofrecer a la nación brasileña un cristianismo auténtico, bello, solidario y fraterno"

Monseñor Walmor Oliveira de Azevedo
Monseñor Walmor Oliveira de Azevedo

"Anunciar la Palabra de Dios y la belleza de hacer resonar en el corazón de los oyentes la Palabra que renueva e impulsa a la misión"

"La escucha de la Palabra de Dios es la experiencia importante, hermosa, de hacernos servidores de la vida, especialmente de los que más lo necesitan, los pobres, los enfermos, los vulnerables, los que están en mayor lucha por el don de la vida"

"Celebrar el cincuentenario del Mes de la Biblia significa para toda la Iglesia en Brasil la primacía de la Palabra de Dios”

Mes de la Biblia 2021

El 1 de septiembre, una misa presidida por Mons. Walmor Oliveira de Azevedo en el Santuario de Nuestra Señora de la Piedad, patrona de Minas Gerais, abrió el Mes de la Biblia en Brasil, que celebra su 50º aniversario. Durante todo el día, se han programado actos en todo el país para conmemorar una jornada que comenzó en 1971.

A lo largo de este tiempo, la Iglesia en Brasil ha vivido el Mes de la Biblia como un momento importante en la vida de la Iglesia, buscando "anunciar la Palabra de Dios y la belleza de hacer resonar en el corazón de los oyentes la Palabra que renueva e impulsa a la misión", según el sitio web de la Conferencia Nacional de Obispos de Brasil (CNBB). Podemos decir que fue uno de los frutos del Concilio Vaticano II, que buscaba profundizar y vivir la Palabra proponiendo el estudio de uno de los libros de la Biblia para cada año.

Con la intención de fomentar la presencia bíblica en la vida de las comunidades, a lo largo de estos 50 años se han creado subsidios bíblicos en las diferentes formas de comunicación, buscando así facilitar un diálogo creativo y transformador entre la Palabra, la persona y las comunidades. Durante el mes de septiembre, hasta la fiesta de San Jerónimo, traductor de la Biblia hebrea al latín, facilitando así el acceso a los textos sagrados, la Iglesia de Brasil, como ya es tradición, está llamada a profundizar en el conocimiento de la Palabra de Dios.

Mons. Walmor

En su homilía, el presidente de la CNBB definió el Mes de la Biblia como "una perla preciosa", agradeciendo a Dios el camino de 50 años en la Iglesia de Brasil en el que la Palabra de Dios ha sido puesta en primer lugar. El arzobispo de Belo Horizonte recordó que fue en esta iglesia particular donde nació el Mes de la Biblia, con el impulso inicial de las hermanas Paulinas, "que se ha convertido en un patrimonio de la Iglesia en todo Brasil, poniendo la Palabra de Dios en primer lugar".

El presidente de la CNBB recordó la importancia del Concilio Vaticano II y de la Dei Verbum, que puso la Palabra de Dios en primer lugar, superando una distancia de siglos entre la Iglesia y la Palabra de Dios. El arzobispo hizo un llamado a descubrir la importancia de la Palabra de Dios, recordando esto al inicio de la Semana de la Patria, momento en el que "estamos llamados a pensar de manera muy profunda, seria y comprometida en la nación brasileña que formamos, exigiéndonos una ciudadanía cualificada, marcada por el diálogo, la solidaridad, el respeto, la cooperación, por una mirada que llegue a los más pobres, sin radicalismos, sin polarizaciones, sin disputas". Esta afirmación cobra gran relevancia en un momento en que la crispación social y política aumenta cada día en el país.

Mons. Walmor expresó su deseo de que la luz de la Palabra de Dios ilumine el camino de la reconstrucción de la sociedad brasileña, insistiendo en que "los cristianos debemos contribuir de forma cada vez más decisiva". El arzobispo de Belo Horizonte pidió vivir esta semana "en el respeto, en el diálogo, en el respeto a las instituciones democráticas", una postura totalmente contraria a la del presidente Bolsonaro, que ataca e insulta continuamente a sus adversarios y a las instituciones que garantizan el sistema democrático en el país.

50 Años Mes de la Biblia

El presidente de la CNBB destacó la figura de María en lo que significa entender la Palabra de Dios y cómo nos ayuda a poner a Cristo en el centro de nuestra vida. También hizo ver la importancia de la Palabra de Dios en la vida cotidiana de la Iglesia, en todas las circunstancias de la vida y en las familias, como "un instrumento para producir en nosotros el amor que nuestros corazones necesitan para alimentar y tener en abundancia para permitirnos vivir un hermoso y amoroso testimonio". El arzobispo señaló que "la escucha de la Palabra de Dios es la experiencia importante, hermosa, de hacernos servidores de la vida, especialmente de los que más lo necesitan, los pobres, los enfermos, los vulnerables, los que están en mayor lucha por el don de la vida, que es un don sagrado, inviolable, dado por Dios a cada uno de nosotros”.

Según el presidente del Episcopado Brasileño, "celebrar el cincuentenario del Mes de la Biblia significa para toda la Iglesia en Brasil la primacía de la Palabra de Dios”. Por ello, instó a que "el anuncio de la Palabra de Dios se convierta, en este Mes de la Biblia, en la reafirmación del compromiso y el cumplimiento de la misión de poner la Palabra de Dios en primer lugar en la vida de la Iglesia, en la vida de la familia, en la vida de la comunidad de fe y en la vida personal de cada uno de nosotros". Insistió en "hacer resonar la centralidad de la Palabra de Dios en toda la Iglesia de Brasil", y así "poder ofrecer a la nación brasileña un cristianismo auténtico, bello, solidario, fraterno, que transforme las mentes y los corazones y nos haga estar unidos como miembros de esta nación".

Finalmente, refiriéndose a la Carta de San Pablo a los Gálatas, libro propuesto por la Iglesia de Brasil para ser estudiado en este cincuentenario del Mes de la Biblia, con el lema "Porque todos sois uno en Cristo Jesús", pidió que sea un instrumento "para que crezcamos en el sentido de pertenencia, crezcamos en el sentido del respeto mutuo y del diálogo, crezcamos en el conocimiento de la hermosa doctrina de nuestra fe, no como algo conceptual, simplemente, no como una rigidez, sino como una experiencia que brota y hace brotar en nuestros corazones la sabiduría del amor".

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