La prensa recoge hoy 7 de noviembre esta noticia:
Un conductor de la compañía municipal de autobuses de Vitoria-Gasteiz, Tuvisa, decidió de su mano mayor, prohibir ayer el acceso a un urbano a una mujer "con el rostro cubierto". Según palabras del chófer, iba cubierta con un burka. La teniente de alcalde Idoia Garmendia, ha reunido al consejo de la empresa municipal para tratar de esclarecer lo ocurrido. También se le han pedido explicaciones al conductor. El Ayuntamiento señala que el reglamento del servicio no especifica nada en cuanto a la vestimenta autorizada para los usuarios. El chófer, a título particular, está "recogiendo firmas" para que se prohíba el acceso a los urbanos a mujeres con el rostro cubierto y desata una nueva tormenta sobre la inmigración en la ciudad.
Non solum sed etiam.
De padres gatos hijos michinos, dice la sabiduría popular.
Por desgracia no me sorprende que la vocación punitiva esté surgiendo en la población de este país. “Gozamos”, casi desde el principio de la democracia, y especialmente en las últimas dos décadas, de una clase política y dirigente que ha dedicado más esfuerzos humanos y económicos al PROHIBIR que al EDUCAR, y el resultado es este: que cualquier ciudadano entienda que la solución de los conflictos y las discrepancias solo tiene una vía: yo prohíbo y tu acatas.
Propongo un sencillo juego: un folio, dos columnas, en una apunte todas las prohibiciones que encuentre en su ciudad, en la otra todas las acciones que no se ven afectadas por ninguna prohibición.
Una segunda parte del juego sería: de la columna de prohibiciones cuántas podrían eliminarse si prevaleciese el sentido común y la buena educación.
Y una tercera parte del juego: Qué acciones recuerda usted que desde las instituciones se estén haciendo para fomentar el sentido común y la buena educación. De hecho esta parte del juego tiene trampa, porque el sentido común y la buena educación la deberíamos llevar cada uno puesta de casa. Y esta se transmite por el ejemplo y el testimonio. Y en la res pública el testimonio que las últimas generaciones de políticos nos han ido dejando es el de la norma, la prohibición, el impuesto, la tasa, la multa. ¡Señores! Que la sociedad necesita también del “refuerzo positivo”. Ahora sancionaran al conductor por ser ¡qué! ¿Digno sucesor de una casta punitiva?
Los ciudadanos tendremos una oportunidad dentro de poco de poner al frente de nuestras instituciones a personas que entiendan de una manera diferente el ejercicio de la política, espero que entre las nuevas propuestas haya alguna que ilusione y que nos demuestre que los problemas se pueden solucionar tendiendo la mano primero y luego la ley y no solo “con la ley en la mano”.
