Sobre todo a los "declarados y que se jactan" Obispo italiano contrario a dar la comunión a los gays

Simone Scatizzi, de 79 años, obispo jubilado de Pistoia (centro norte de Italia) desató hoy las iras de los grupos homosexuales italianos al mostrarse contrario a que los gays "declarados y con ostentación" puedan comulgar, al considerar la homosexualidad "un desorden, un pecado que excluye de la comunión".

Scattizo hizo esas declaraciones al portal de internet italiano "Pontifex.Roma", que las publicó hoy y ante el que señaló que la homosexualidad "en cuanto tal es un desorden" y que "prácticarla y hacer ostentación de la misma es un pecado que excluye de la comunión" y que por tanto como obispo está obligado "en líneas generales" a rechazar dar la comunión a un gay.

No obstante, agregó que si un homosexual se le acerca a comulgar no podría negarse, ya que no sabe si esa persona "se habría confesado, arrepentido o haber cambiado vida".

Las palabras del prelado fueron duramente criticadas en las páginas web de los grupos de gays, lesbianas y transexuales de Italia (GLBT), así como por el presidente del colectivo gay más importante del país, Arcigay, Aurelio Mancuso, que denunció una "estrategia ofensiva y discriminatoria del Vaticano".

Según Mancuso, el Vaticano "pone en boca" de ancianos obispos jubilados "las cosas más horribles" contra los gay, "con el objetivo de atacar la dignidad de estas personas".

"El Vaticano de manera hipócrita no tiene ni siquiera la valentía de expresarse directamente y llevar su guerra contra quienes afirman libremente su identidad. Los gays, lesbianas y transexuales creyentes deben de dejar a un lado esta iglesia fascista, homófoba y cómplice de la violencia", afirmó Mancuso en una nota.

Al igual que hoy Scattizi, los pasados meses otros prelados jubilados también se mostraron contrarios a dar la comunión a los gay, como afirmó el prelado emérito de Grosseto, Giacomo Babini, que calificó la homosexualidad como "un pecado gravísimo" y aseguró que él jamás daría la comunión "a uno como Vendola".

Con Vendola se refería a Nicki Vendola, presidente de la región sureña de Puglia (Apulia), que se define públicamente como comunista y católico y es homosexual declarado.
Babini también calificó de "aberrante" la "práctica de la homosexualidad", dijo que era un "vicio contra natura" y se mostró contrario a que los ayuntamientos faciliten casas a las parejas homosexuales.

No fue el único, el obispo jubilado de Lucera-Troia, Francesco Zerrillo, dijo hace varios días que "habría que invitar" a los gay a no acercarse a comulgar "para no alimentar el escándalo la comunión a los gay.(RD/Efe)

Volver arriba