Incide en que puede ser pecado, pero no debe ser delito El Patriarca ortodoxo ruso pide tolerancia con los homosexuales
El Patriarca de la Iglesia Ortodoxa Rusa (IOR), Kiril, pidió hoy tolerancia con los homosexuales durante una reunión con el secretario general del Consejo de Europa, Thorbjorn Jagland. "Aceptamos cualquier elección de la persona, inclusive en la esfera sexual. Es un asunto personal de cada cual", afirmó Kiril, citado por la agencia oficial RIA-Nóvosti.
Kiril, que recibió a Jagland en la catedral moscovita de Cristo Salvador, también aseguró que "los pecados cometidos no deben ser castigados" por la ley. "Por eso, nos oponemos periódicamente y nos opondremos a cualquier discriminación contra personas con una orientación sexual no tradicional", apuntó.
En todo caso, el líder ortodoxo subrayó que "la tradición religiosa de prácticamente todos los pueblos testimonia que la homosexualidad es un pecado".
Además, se manifestó contrario a la equiparación de las relaciones entre dos personas del mismo sexo y las tradicionales relaciones heterosexuales.
Kiril también insistió en que la IOR nunca apoyará el aborto ni la eutanasia y abogó por que el Consejo de Europa sirva de plataforma para que los creyentes en Europa y el mundo pudieran expresar sus opiniones religiosas.
La IOR siempre ha sido muy crítica con la homosexualidad y se ha opuesto tanto a la legalización del matrimonio homosexual, como al derecho de las minorías sexuales a la adopción y a las manifestaciones del orgullo gay, actos que considera un "sacrilegio".
Kiril, que fue entronizado como Patriarca en febrero pasado, es considerado un firme partidario del ecumenismo, al igual que el papa romano, Benedicto XVI, con el que se entrevistó en el Vaticano en 2007, lo que alimentó las esperanzas de que ambas iglesias superen el cisma que las separa desde 1054.
Hasta el 27 de mayo de 1993 no fue abolido el artículo 121 del código penal de Rusia que sancionaba con penas de cárcel las prácticas homosexuales. Ese mismo año también la psiquiatría oficial dejó de considerar la homosexualidad como una enfermedad mental.
(RD/Efe)