El Director de la Oficina de Prensa, Matteo Bruni, informó que esta tarde, a las 15.30 horas, el Santo Padre se ha reunido con un grupo de unos cuarenta indígenas, entre participantes en el Sínodo para la Región Panamazónica y otras iniciativas que se están llevando a cabo en Roma en estos días, acompañados por Su Excelencia Monseñor Roque Paloschi, Arzobispo de Porto Velho, y Su Eminencia el Cardenal Claudio Hummes.
El encuentro se abrió con un breve discurso a dos voces, leído por una mujer y un hombre, representantes de los pueblos indígenas, que a través de ellos agradecieron al Santo Padre la convocatoria del Sínodo y pidieron ayuda para hacer realidad su deseo de asegurar una vida pacífica y feliz a sus pueblos, cuidando su tierra, protegiendo sus aguas, para que las puedan disfrutar sus descendientes.
El Papa Francisco dirigió unas palabras a los presentes, subrayando que el Evangelio es como una semilla que cae en la tierra que encuentra y crece con las características de esta tierra. Con referencia a la región amazónica, el Santo Padre señaló los peligros de las nuevas formas de colonización.
Finalmente, refiriéndose a los orígenes del cristianismo, nacido en el mundo judío, desarrollado en el mundo greco-latino y que luego llegó a otras tierras, como la eslava, la oriental, la americana, el Papa Francisco reiteró que el Evangelio debe inculturarse, porque "la gente recibe el anuncio de Jesús con su propia cultura".