¡Feliz viernes! El mundo del madrigal es tan interesante y tan rico que no nos cansamos de disfrutar de esas maravillosas miniaturas (incluso algunas no tanto). Hoy vamos a hacerlo con uno de los grandes especialistas en esta materia (y no, no es Claudio Monteverdi).

Es Sigismondo d'India (c. 1582-1629), compositor italiano nacido probablemente en Palermo. Él mismo decía que procedía de familia noble y que había recibido su formación de diversos ilustrados en la música. En 1606 podría haber estado en Mantua y allí pudo conocer a Claudio Monterverdi. En 1611 se estableció en Turín para ser director de la música de la corte de Carlo Enmanuel I, duque de Saboya y de ahí proviene la gran mayoría de sus obras. Allí también compuso en un nuevo estilo que daba menos énfasis a la polifonía, es decir, el madrigal. Luego pasó a Módena y posteriormente a Roma, para trabajar para el cardenal Mauricio, a quien también le gustaba la música profana aunque d'India se dedicó más a la religiosa. Fue llamado a trabajar en la corte de Maximiliano I de Baviera pero no sabemos si realmente llegó a ir.

Escuchemos su madrigal Cruda Amarilli. Pone música a uno de los poemas más famosos del siglo XVI, del mismo nombre, de Giovanni Battista Guarini. Tras el éxito en la obra homónima de Monteverdi d'India publicó (en 1609) una pieza para una sola voz, de forma que esta declama más claramente la obra de Guarini. El maestro utiliza diversos elementos musicales para enfatizar el texto, como lo que se escucha sobre las palabras fugace y la bella forma de realzar la palabra tacendo. En fin, un verdadero bombón que tiene el sabor del más delicado chocolate.

La interpretación es de Evelyn Tubb (soprano) y Peter Croton (laúd).