Preces de los Fieles (D. 27º TO C 02.10.2016): La fe cristiana impide el dominio y la sumisión

La debilidad de fe, incluso su falta, aparece en el afán de dominar y buscar pompa y prestigio. En las iglesias nadie debe dominar ni presumir. El Espíritu de Jesús crea fraternidad cristiana y excluye la relación amo-siervo. El Espíritu iguala: amaos y servíos unos a otros. Pidamos vivir como Jesús diciendo: Yo estoy en medio de vosotros como el que sirve” (Lc 22, 25s).

Por la Iglesia:
- que “sirva siempre generosa y eficazmente a los hombres de nuestro tiempo”(GS 93);
- que brille en ella la humildad, la sencillez, el diálogo, la ayuda a los más débiles.
Roguemos al Señor:Yo estoy en medio de vosotros como el que sirve” (Lc 22, 25s).

Por los servidores de la Iglesia (papa, obispos, presbíteros, diáconos, catequistas...):
- que alejen toda apariencia de dominio y vanidad;
- que se distingan por la conducta éticamente ejemplar, no por hábitos y adornos.
Roguemos al Señor: Yo estoy en medio de vosotros como el que sirve” (Lc 22, 25s).

Por nuestros políticos:
- que sean honrados y lo parezcan, con transparencia;
- que trabajen por el bien de todos, dialoguen, sirvan al bien común.
Roguemos al Señor: Yo estoy en medio de vosotros como el que sirve” (Lc 22, 25s).

Por los trabajadores del campo:
- que cuiden el medio ambiente, siendo respetuosos con la naturaleza;
- que puedan vivir de su trabajo, con dignidad y cuidado de sus familias.
Roguemos al Señor: Yo estoy en medio de vosotros como el que sirve” (Lc 22, 25s).

Por la paz de nuestro mundo:
- que cesen las guerras en todos los países;
- que se corrijan las causas de la violencia: la pobreza, la injusticia, el paro...
Roguemos al Señor: Yo estoy en medio de vosotros como el que sirve” (Lc 22, 25s).

Por esta celebración:
- que nos comunique el amor de Jesús, su hmildad, su servicio...;
- que la comunión con Cristo sea comunión fraternal con todos.
Roguemos al Señor: Yo estoy en medio de vosotros como el que sirve” (Lc 22, 25s).

Nosotros, Jesús hermano, somos continuadores de tu Reino: nos sentimos hijos del mismo Padre y hermanos tuyos. Desde esta fe queremos construir tu Reino de fraternidad. Que tu Espíritu nos guíe por los siglos de los siglos.

Amén.

Rufo González
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