Metáfora

En la vida encontramos cuestas de montañas, rincones llenos de sombra en los valles, casas de granito o de adobe, gente que nos quiere y gente que nos odia (aunque ni nosotros ni ella misma sepa por qué), cosas buenas y cosas malas, cosas me que dan contento y cosas me ponen triste. Pero no encontramos el Paraíso Terrenal, metáfora de la perfección, porque nunca existió. Ser hombre es ser imperfecto. Llegamos a la vida sin saber cómo y la perderemos sin saber cómo, ni cuándo ni dónde porque la muerte es una certeza indeterminada. Pero la mayoría de los hombres es feliz sin que el ser imperfecto le preocupe; si buscaran la causa de su felicidad dejarían de serlo o descubrirían que lo son porque tienen un sitio al sol y al aire y “porque hay paz al lado de acá de los montes” (Pessoa).
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