Miles de fieles copan el centro de la capital hasta las cinco de la mañana Una "madrugá" en el ferragosto de Madrid
Miles de fieles recorrieron anoche las calles del centro de Madrid junto a los pasos de la Semana Santa del Via Crucis de la JMJ, en una espectacular "madrugá" en el ferragosto madrileño, que se prolongó hasta las cinco de la madrugada sin apenas incidentes. La Virgen de Regla abría la procesión, que llegó a las 00.45 horas a la Puerta del Sol entre los aplausos y la admiración de miles de ciudadanos.
A paso lento, acompañados de sus hermandades y bandas de música, los pasos, llegados de toda España, avanzan por el Paseo del Prado y la Calle Alcalá arriba entre el fervor popular.
En la Puerta del Sol les esperan peregrinos, ciudadanos y un buen número de furgonetas de la Unidad de Intervención Policial que hace pocas horas dispersaban a un grupo de indignados laicos que querían protestar.
Al inicio de la procesión, cuando los primeros pasos en ponerse en marcha pasaban ante los altares en los que otras imágenes esperaban su turno para comenzar su andadura los cofrades de ambas hermandades se rendían homenaje, de manera espectacular, bailando sus respectiva imágenes.
Así, el Jesús de la Caída y María Santísima de la Amargura, de Úbeda (Jaén), rindieron homenaje a Jesús el Nazareno de León que espera su turno para incorporarse a la procesión.
No ha habido saetas, pero si grandes ovaciones y el homenaje de cientos de teléfonos móviles grabando el avance solemne de algunas de la imágenes mas veneradas y mas queridas de toda España.
Así, el paso malagueño de Jesús del Prendimiento, que representa el beso de Judas en el Monte de los Olivos y que con 250 costaleros es el de mayor tamaño de toda la procesión saludaba bailando a Jesús Nazareno de León entre los aplausos de miles de ciudadanos.
El público que acompaña a las imágenes son en su inmensa mayoría españoles, ciudadanos de Madrid que no han querido perderse el espectáculo pese a no ser ni jóvenes ni peregrinos.
Minutos mas tarde, los legionarios entraban desfilando en el Paseo del Prado a toda velocidad para procesionar a su Cristo de Mena, de Málaga, cantando a pleno pulmón 'Soy el novio de la muerte'.
Miles de ciudadanos que se agolpaban a ambos lados del Paseo del Prado para ver el espectáculo les jaleaban con entusiasmo: "Viva la Legión", "Viva el Ejército" e incluso "¡Viva España católica!".
(RD/Efe)